Jalisco vivirá un periodo de sequía similar al de 2021, por lo que se espera que haya escasez de agua en los meses de abril, mayo y junio, afirmó Valentina Davydova Belistskaya, profesora investigadora del Departamento de Ciencias Ambientales, del Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA), en conferencia de prensa.
Añadió que la temporada de estiaje durante 2022 será menos crítica, debido a que el año pasado hubo un temporal de lluvias “muy por arriba de lo normal, que se extendió hasta septiembre y recuperó las condiciones de abasto de agua” en algunas regiones de la entidad, particularmente en la Cuenca Lerma-Santiago-Pacífico.
No obstante, hacia finales de mayo y mediados de junio el problema podría agudizarse debido a la evaporación del agua y del caudal, que dejará de recibir la parte alta y baja de la cuenca por la falta de lluvia en las próximas semanas.
“No es tan severo como empezamos este año; sin embargo, podemos terminar igual de mal porque el pronóstico es que para el mes de mayo se prevén condiciones pobres de lluvia, particularmente en la región Occidente a causa del fenómeno de La Niña, y que la temporada de lluvias se alargará hasta finales de junio”, informó.
La especialista dio a conocer que al 31 de marzo, 70 por ciento del territorio mexicano tenía condiciones de sequía de moderada a severa, incluso la parte Noreste de México se mantiene con sequía extrema.
La mayoría del territorio de Jalisco tiene condiciones similares de estiaje, excepto en la parte Norte y Sur de la Costa del Pacífico, que presentan condiciones anormalmente secas, es decir, que hay disponibilidad de agua limitada, mientras que en el norte hay sequía severa.
En cuanto al estado de las presas, el pasado 16 de marzo el lago de Chapala y la Presa Calderón, principales fuentes abastecedoras de agua para el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG) tenían 71 por ciento y 73 por ciento de capacidad, respectivamente. Al día de hoy, Chapala está en 65 por ciento de su capacidad y la Presa Calderón, 68 por ciento.
“Estamos ante los tres meses más secos y cálidos, es decir, estamos ante las condiciones de una alta probabilidad en el desarrollo de los incendios forestales, como en su propagación. El problema es que la falta de agua va a complicar mucho el apagado de estos incendios locales”, advirtió Davydova Belistskaya.
Más incendios en la entidad
Gerardo Alberto González Cueva, profesor del Departamento de Producción Forestal del CUCBA, señaló que a causa de las altas temperaturas que habrá en los próximos meses, y la falta de agua, se espera una temporada crítica en el número de incendios en la entidad, aunque todavía es posible prevenir su magnitud.
De acuerdo con los datos de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), al 31 de marzo ha habido 78 incendios en Jalisco, con una superficie afectada de 739 hectáreas, que representan un número bajo, aunque aún faltan los meses más álgidos de la temporada de sequía y los días de vacaciones, que es cuando muchas personas acuden a las áreas naturales para descansar.
Recomendó a la población tener extremo cuidado cuando visitan algún parque o zona boscosa y evitar prender fuego para preparar algún alimento, ya que esto es el principal detonador de los incendios que pueden descontrolarse, debido a que hay mucho viento y materia orgánica dispuesta para la combustión.
Recordó que este año las brigadas de patrullaje y prevención del Bosque La Primavera serán reactivadas y cuentan con la participación de las y los estudiantes del CUCBA de la UdeG, así como de algunos de sus profesores.
