“La poesía está ligada a lo emocional y se juzga de inútil” dice la poeta, editora y directora de la editorial Typotaller y agrega “que tenemos una necesidad de compartir con el otro una emoción, sentimientos y de ahí nacen los temas”.

Zertuche habla de la poesía como un ente que existe y resiste, como un lugar que permite expresar los demonios más ocultos del ser y compartir ideas de forma estética para que otros se sientan identificados o reflexionen su propio contexto.

“Casi siempre se tiene esa etapa en la que lo que te sucede tiene un encuentro con la palabra, siempre fui consumidora de literatura y siempre el género que más me gustó fue la poesía, porque encontraba particularidad expresiva y de desfogue, como una ruta para expresarme; y después los motivos cambiaron porque se van adquiriendo herramientas con las que leer la vida de otra manera”.

Su educación en letras hispánicas le ayudó a comprender que la lectura poética va cambiando, asimismo encontró personas con el mismo ímpetu de compartir poesía, por lo que comenzó un ciclo de lectura que duró dos años y se transformó en una necesidad de hacer vivir el lenguaje poético.

Comparte que en su mayoría la poesía habla del amor, no de ese romántico, acaramelado que proyecta el ideal, sino del amor como emoción vinculativa que pasa por la familia, las amistades, las cosas, lo personal, la naturaleza; un sentimiento que invade muchas formas y que permite al lenguaje desgajarse.

“Desglosar los temas en la poesía es difícil, se ha escrito tanto del amor que la preocupación ahora es no caer en clichés, encontrar el punto novedoso, pero quizás va acorde a la temporalidad en la que nos encontramos y las acciones que se viven, porque son temas universales: amor, muerte, duelo; hay algo muy complejo y abstracto dentro del escribir poesía”.

Entre las nuevas tendencias de la poesía, Zertuche comparte que existe la “Poesía basura” o “Poesía exprés”, la cual tiene que ver con escribir en espacios que no trascienden o se vuelven efímeras.

“La poesía puede estar en cualquier sitio, pero hay una etiqueta que a lo largo de los años hemos puesto a lo que es la poesía. En el kínder nos dejan jugar con la palabra pero después se pretende volverla útil, ahí tenemos un cliché humano, porque tenemos toda la capacidad para ver lo poético en el mundo, pero estamos tan empapados de información que el sistema cobra más importancia que el goce estético”.

Por otra partr, el uso de redes sociales para compartir poesía es muy útil, explica Zertuche, ya que permite que los jóvenes conozcan autores longevos o descubran otras formas de transitar emociones.

“Creo que todo aporta, en su momento existió un movimiento de poesía en acción donde se pintaban las bardas con versos; entonces creo que esté donde esté la poesía aporta y nos da otras visiones”.

En la actualidad las juventudes se han involucrado con la poesía de diversas índoles, y cada vez hay más autoras hablando de temas actuales complicados, lo que es un gran avance en la apuesta de la literatura, añadió.