Por amor al arte

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    El Centro Cultural Tlatoani, AC, es una institución dedicada “a la cultura, por puro amor al arte”, comenta el maestro Carlos Erasmo, uno de los fundadores de la asociación.
    Fue creado con objetivos distintos a los tradicionales: atender a personas con capacidades especiales que les interesaran las artes y quisieran desarrollarse gracias a la cooperación más bien social que económica para su crecimiento.
    El centro abrió sus puertas en mayo de 2005 y en estos pocos meses ha acumulado importantes logros, como son el número de estudiantes con que cuenta (173 en total), la cobertura de diversos instrumentos y estilos de danza, su participación en las Fiestas de Octubre y la presentación, en diciembre pasado, de una ópera en el hospicio Cabañas.
    A pesar de las duras críticas, la pieza en cuestión obtuvo reconocimiento si se piensa en la brevedad con que fue preparada (tan solo tres meses) y los retos que debieron vencerse para su representación, pues una parte del montaje corrió a cargo de los propios estudiantes.
    Amahl y los visitantes nocturnos, ópera en un acto de Gian Carlo Menotti, contó con la participación de más de 40 alumnos, entre coros y bailarines, al igual que con el apoyo de solistas ya experimentados que colaboraron con la obra aun cuando no pertenecían al estudiantado.
    De acuerdo con Enrique Suárez, uno de los iniciadores del proyecto y maestro de canto en el centro cultural, las ideas se concretan de modo satisfactorio y en menos tiempo del esperado. Disponen de talleres de guitarra, violín, bajo, instrumentos de viento, percusiones, canto y composición, así como baile de jazz y árabe, una o dos veces por semana.
    “Los vecinos, por ejemplo, están felices de que en esta zona, destinada sobre todo a bares, haya este tipo de espacios, y acuden a los conciertos. La UdeG se encuentra al tanto de lo que hacemos. Somos egresados de la Universidad y algunos profesores que cooperan en el centro han estudiado música en la UdeG”.
    Sin embargo, la idea no es que los talleres sean una competencia para los que realiza y promueve el Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño. Antes bien, se trata de una labor cooperativa a raíz de la demanda creciente en Guadalajara de cursos de arte, por lo que la necesidad de fomentar estas clases es cada vez mayor.
    Tras un arduo trabajo de remodelación, el inmueble que alberga a la asociación fue acondicionado con éxito sus fines. Con zonas delimitadas para cada instrumento, un salón de baile, baños construidos según las necesidades de personas con capacidades especiales y un pequeño auditorio para conciertos y presentaciones de los propios alumnos, la adaptación está casi concluida.
    Los responsables del centro cultural y sus fundadores, Carlos Erasmo, Vladimir Gómez, Enrique Suárez y Francisco Gómez, siguen fraguando ideas para el crecimiento del proyecto. Por ello, en este 2006 piensan preparar conciertos al interior de la escuela, así como otra ópera, que esperan montar en un foro alterno a sus instalaciones.
    El maestro Suárez se encargará además de impartir un nuevo curso avanzado de canto para mariachi, como una iniciativa accesible y distinta.
    Para mayor información, comunicarse a los teléfonos 11 99 35 35, 11 99 36 36, o al correo electrónico: centrocultural_tlatoani@yahoo.com

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