Nadie es profeta en su tierra. A pesar de que la Unión Europea ya publicó la patente de la novedosa técnica para curar la migraña y tratar el glaucoma, que desarrollaron Carlos Joel Miramontes Muñoz y Héctor Tostado Romo, en México unos cuantos lo saben.
Carlos Joel Miramontes Muñoz, especialista en electrofisiología y Héctor Tostado Romo (miembro del Sistema Nacional de Investigadores, SNI), los dos egresados de la carrera de médico cirujano y partero por la Universidad de Guadalajara, han peregrinado por distintas instituciones mexicanas, pero no les han prestado la debida atención.
Corría 1996 cuando el doctor Tostado hacía una maestría en Estados Unidos, en el hospital de Ciencias de la Salud de San Antonio Texas, de la Universidad de Texas.
“Hice esos estudios de posgrado en el área de electrofisiología para tratar enfermedades del sistema nervioso, enfocado principalmente al edema cerebral. En el transcurso de mi estancia en la Unión Americana, hasta 1998, desarrollé el proyecto conceptual de un neuroestimulador dirigido a reproducir pulsos eléctricos iguales a los del sistema nervioso para regular la presión intracraneal en el caso de la migraña. Mi objetivo inicial era ubicar potenciales eléctricos del ganglio que regula la presión en nuestra cabeza. Por falta de un estímulo eléctrico no abre los sistemas de drenaje del cerebro”.
Doctor Héctor Tostado, ¿dónde desarrolló la tecnología?
Fue en México. Aquí desarrollé el software y el hardware, con la ayuda del doctor Carlos Miramontes. En el vecino país del norte salía más caro: en total, 500 mil dólares concretizar el concepto electrónico médico, y aquí, en un millón trescientos mil pesos.
¿En qué consiste el invento de ustedes?
Es un reproductor de potenciales eléctrico-fisiológicos, iguales a los que el cerebro manda sobre una estructura específica. Coloquialmente podría definirse como un comportamiento eléctrico sobre órganos y sistemas.
¿Me podría describir la metodología empleada?
El meollo está en estimular al sistema simpático. En el caso de la migraña, ésta es ocasionada por la inhibición simpática del ganglio radial. Esto quiere decir que no hay actividad eléctrica sobre el ganglio. Entonces, con ayuda de un software y hardware es reproducida. Los electrodos son colocados en la parte anterior del cuello y en la parte posterior a nivel cervical, donde están las arterias vertebrales para mejorar la irrigación del cerebro y quitar el dolor. Cuando se trata de enfermedades oculares, una de las partes donde se coloca es en la base del cráneo o región occipital.
Este invento, ¿es único en el mundo?
[Doctor Carlos] Lo nuevo es la tecnología, el tipo de frecuencia y onda que utilizamos. La primera es de hasta 60 hertz. Mucho menos de lo que desarrolla un celular, y la onda es cuadrada continua. Asemeja a una estructura del sistema nervioso, llamado nodos de Ramvier. Eso es lo que hace diferente a nuestro invento. Hay miles de estimuladores eléctricos en todo el mundo.
¿Tienen registro de su invento en México?
Sí, dentro del Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI). Tenemos la patente, por lo que está protegido. Sin embargo, nos valoran más en otros países que en el nuestro. Específicamente en la Unión Europea estamos reconocidos por el Centro de Investigación EuroEspes, que es uno de los más importantes en ese continente. Éste nos dio la oportunidad de vender nuestra tecnología, cuando aquí no se nos tomó en cuenta. Nos ignoraron. Incluso Ramón Cascabeles, el presidente de dicho centro, uno de los valuadores para determinar quién ganará el premio Nobel, sabe de nuestro trabajo. Es muy triste. Tocamos muchas puertas en México y no se abrió ninguna. Si hubiéramos vendido una franquicia a algún hospital mexicano, hubiéramos contribuido a generar turismo médico y, a la vez, obtenido recursos para perfeccionar nuestra técnica.
Además de la migraña y el glaucoma, ¿qué otras enfermedades son tratadas con esta tecnología?
La epilepsia, y con muy buenos resultados. De cinco años a la fecha hemos controlado a 20 pacientes con esta enfermedad.
¿Cuántos pacientes atienden en promedio?
Aproximadamente 10 diarios, muchos de ellos con migraña.
¿En qué países ya han distribuido su invento?
Alemania, Inglaterra, Francia, España, Suiza, Italia y Bolivia. Y tenemos el orgullo de decir que es tecnología cien por ciento mexicana.
Primera persona * Héctor Tostado (primero de izquierda a derecha) estudió la carrera de médico cirujano en la Universidad de Guadalajara. Pertenece a la generación 1985-1991. Carlos Joel Miramontes cursó la misma carrera en la máxima casa de estudios de Jalisco (1994-2000). Es especialista en electrofisiología.