No sólo se preocupa por la calidad de su propia institución, sino por la impartida en todo el estado. Ese es uno de los propósitos que ha puesto en marcha la Universidad de Guadalajara mediante el Programa de acompañamiento hacia la calidad educativa (Proace).
Comenta la maestra María Inés Partida Robles, coordinadora de estudios incorporados, que “las universidades de Estado, como la UdeG, son responsables de la educación de los muchachos de todo el estado, no sólo de nuestra casa de estudios”.
Con el objetivo de mantener la congruencia en la educación que brinda la UdeG y las universidades incorporadas, la Coordinación de Estudios Incorporados (CEI) se ha preocupado durante los últimos 10 años por la calidad, tanto académica como administrativa, de los programas de las universidades incorporadas.
Con base en las políticas implementadas en el ámbito internacional con relación a la calidad educativa, dicha coordinación formulará un programa que beneficie a la sociedad jalisciense. “Si nosotros tenemos programas de alto nivel, y se los ofrecemos a las universidades incorporadas, queremos que éstas gocen de reconocimiento y que tengan completos sus programas de estudio, porque son responsabilidad nuestra, y así se beneficia en conjunto a los jaliscienses y al país en general en materia educativa”, comentó la maestra María Inés.
El programa de acompañamiento consiste en la elaboración de un proyecto estratégico que permitirá promover y desarrollar una cultura de calidad entre las universidades incorporadas a la Universidad de Guadalajara.
La responsable del Proace afirmó que “la Universidad debe ayudar a transitar hacia la excelencia académica a sus escuelas incorporadas, y en tal sentido, hará un despliegue académico y administrativo, de forma que procesos y procedimientos se sustenten en criterios de calidad y certificación nacional”.
El proyecto consiste en evaluar a las universidades incorporadas en dos etapas: la primera será realizada según los estándares de los Comités Internacionales para la Evaluación de la Educación Superior (CIEES); una vez acreditada esta fase, prosigue una evaluación más, pero esta vez con base en los estándares del consejo para la acreditación de la educación superior, A. C. (Copaes).
De no acreditar la primera etapa, la Coordinación de Estudios Incorporados de la UdeG proporcionará a las universidades los medios por los cuales pueden llegar a dicha acreditación, mediante manuales, diplomados y cursos de preparación, tanto para el personal académico, como para el administrativo.
Como no todas las universidades incorporadas tienen el mismo nivel en cuanto a su calidad educativa, algunas conseguirán la acreditación en menos tiempo que otras. Se prevé que para el año 2010, el total o la mayor cantidad posible de dichas universidades alcance la acreditación de Copaes, que es el máximo grado a obtener. La UdeG cuenta con el 86 por ciento de los programas educativos acreditados, y espera que el total de éstos alcancen dicha acreditación.
Los criterios que se calificarán para alcanzar la acreditación Copaes, abarcan distintos rubros, pues no sólo se tienen en cuenta los programas educativos, sino el total de los elementos que puedan hacer que funcionen de manera integral.
También se tomará en consideración el aspecto administrativo y financiero, la planeación y evaluación, el modelo educativo y plan de estudios, los alumnos, el personal académico, los servicios de apoyo a los estudiantes, la infraestructura, la trascendencia del programa, la productividad académica, la vinculación y la normatividad y políticas institucionales.
Tanto la acreditación CIEES, como la de la Copaes tienen un costo. Una vez que se agenda la visita de los CIEES para brindar asesoría, éstos solicitan que la institución educativa pague 1,500 pesos por asesoría a cada uno de los tres evaluadores que asisten. También absorbe el costo de viáticos de traslado. En el caso de los organismos acreditadores del Copaes, cada uno fija un costo por el proceso, que ronda entre los 60 y 80 mil pesos e incluye los viáticos de los evaluadores.
