Mi primer experiencia con La gaceta

    1121

    Soy estudiante del primer semestre de la licenciatura en periodismo, en el Centro Universitario del Sur (Ciudad Guzmán).
    El pasado martes 8 de septiembre, consulté por primera vez La gaceta en su edición 583.
    Me encantaría haberles escrito para felicitarlos, pero por desgracia no es así: pude percatarme de varios detalles que le restan credibilidad a una publicación proveniente de una institución tan importante y de prestigio, como por ejemplo, en la sección Observatorio, el comentario publicado por Alfredo Rico (coordinador de la carrera de sociología) tiene una enorme falta de ortografía: “envío”, cuando obviamente se trata del verbo ‘enviar’ en pasado y lo correcto es “envió”. Estamos entrando en ortografía de primaria prácticamente.
    Ya no entro en detalles de que si el mismo comentario es “extraño” o no, pues tampoco me siento tan preparada y capaz para emitir una crítica al respecto.
    Otra situación que a mi parecer es de mal gusto y desprestigio para nuestra gaceta fue la “crónica” “Mentadas sin límite de tiempo”, realizada por Víctor Manuel Pazarín, en colaboración con Jorge Alberto Mendoza, la cual, además de no cumplir con las características de una crónica, me parece incongruente. Su autor hace comentarios fuera de lugar, como “que si la calzada se llena de pobres y nacos”, “el Gobierno tiene la culpa de tanta vulgaridad y frustración del público de la lucha libre”, “la lucha libre es una farsa”.
    Además, es obvio lo vulgar que luce la nota con ciertas imágenes y palabras que para qué entramos en detalles. A pesar de ser parte de nuestro día a día, siempre darán una mala imagen y es de mal gusto encontrarlas en publicaciones serias o que al menos forman parte de mí, porque soy parte de la Universidad de Guadalajara.
    Esa es la primera edición que leo e imagino que ese tipo de errores se han presentado en casi todas las ediciones a lo largo de la historia de La gaceta. Sería importante que mejoraran, por el progreso de la UdeG.
    Una felicitación, porque la publicación en sí es muy buena (no crean que me pareció mala, sino que señalo detalles simples).

    Artículo anteriorRogelio Villarreal
    Artículo siguienteCero y van dos