El escritor colombiano Juan Gabriel Vásquez habló con los jóvenes sobre las características de sus novelas y del vínculo que tiene con Laura Restrepo –quien no asistió al encuentro librero por la situación de la pandemia en España–, en la actividad “Mil jóvenes con…”, dentro de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL 2021).
La principal obsesión en los libros de Juan Gabriel Vásquez es el cruce de caminos entre lo público y lo privado. Todas sus novelas tratan de explorar, de alguna manera, ese momento en que las fuerzas tan misteriosas de la historia y la política invaden las vidas privadas, la vida secreta e íntima de los personajes. Eso es lo que trató de hacer, por ejemplo, en El ruido de las cosas al caer, novela que fue galardonada con el Premio Alfaguara en 2011.
La novela cuenta un momento en la historia reciente de la historia colombiana: esos años en que Pablo Escobar y el Cártel de Medellín le declararon la guerra al Estado colombiano, y que marcó a todos los ciudadanos.
“Los colombianos, durante esos años, éramos básicamente rehenes de una guerra que en cierto sentido no era nuestra. Esa fue la década que va desde 1984, cuando Pablo Escobar manda asesinar a un ministro de justicia, Rodrigo Lara Bonilla y 1993, en que el mismo Escobar muere cazado por una coalición de fuerzas de distintos países, principalmente Colombia y Estados Unidos”, relató.
Esos años dejaron a la generación a la que pertenece Vásquez –constituida por aquellos que nacieron en los años 70– una marca indeleble.
La inquietud del novelista fue contar el lado que no se ve de la guerra contra las drogas, lo que le hizo a la vida privada de la gente, a la manera de ser hijos, hermanos, amantes, amigos, y expresar cuáles cicatrices dejó la violencia. Por fortuna para Vásquez la novela es una forma de contar lo invisible de un lado que es muy visible.
“La novela es eso, es el espacio donde podemos contar todos los aspectos invisibles porque son emocionales, psicológicos; porque ocurren en el alma”.
“En el resto de mis novelas he tratado también de explorar el lado invisible de los hechos visibles de la historia, de la política; el lado secreto e íntimo de los hechos públicos y conocidos que nos cuenta el periodismo o los documentales o la historia; pero la idea con una novela es siempre tratar de contar cosas que nadie más pueda contar, que ocurren en lugares a donde no puede llegar el periodismo o la historia; todo eso me interesa ahora porque encuentro un vínculo con los libros de la escritora Laura Restrepo”, agregó Vásquez.
Delirio es una novela de Restrepo, galardonada también con el Premio Alfaguara en 2004. Lo que hace en ella es explorar el lado más secreto, más íntimo e invisible de un momento. Hay un personaje que tiene relaciones comerciales con el narcotráfico, y eso acaba generando una bola de nieve y deja consecuencias que afecta lo más privado que es el equilibrio mental.
Vásquez describió que en la lectura de esa novela extraordinaria es como una metáfora de la locura de todo un país, del desequilibrio mental de todo un país, “me parece que es un lugar donde nuestros libros se encuentran. Los dos hemos querido contar, como lo hace la novela, las vidas secretas, privadas e íntimas de un espacio social, histórico, que es de naturaleza muy visible y conocida”.
