El eclecticismo y la hibridez

1287

Desde hace algunos años sigo la obra de Simon Reynolds. Durante este tiempo, he descubierto a uno de los periodistas mejor documentados y con una aguda visión de lo que es la música y su extenso universo.  Reynolds, formado en la principal escuela de periodismo musical (la de los años ochenta en Inglaterra), posee la capacidad  de señalar  los lazos históricos e inquebrantables que tiene la música en cada uno de nosotros.

Postpunk. Romper todo y empezar de nuevo, es uno de los libros más recientes de este autor, que no deja escapar las ideas precisas y la crítica sustentada en la experiencia. Si bien existen cientos de trabajos que documentan aquellos años en los que el punk desafió al status quo de la música con su nihilismo de tres acordes y la ética do it yourself, esta investigación es la primera en recuperar aquellas bandas que supieron ver en las condiciones generadas por el punk la oportunidad para establecer una verdadera ruptura con la tradición y experimentar por fuera de los estrechos parámetros del rock.

Grupos como PiL, Joy Division, The Fall, The Slits, Devo, The Residents, Throbbing Gristle o Liquid Liquid exploraron territorios previamente desconocidos al incorporar las técnicas de producción del dub y la música disco, las radicales estrategias compositivas del krautrock, la música contemporánea, el free jazz y el groove, y la economía sonora del funk.

Pero no sólo de música se alimentó el postpunk, advierte Simon Reynolds en este libro. Cabaret Voltaire tomó prestado su nombre de Dada; Pere Ubu adoptó el suyo de Alfred Jarry; Gang of Four, inspirado por Brecht y Godard, trató de deconstruir el rock; los letristas absorbieron la ciencia ficción radical de J. G. Ballard, Philip K. Dick y William S. Burroughs; bandas como The Pop Group o Contortions se inspiraron en el teatro de la crueldad de Artaud para romper las barreras entre el público y el escenario. El autor dice: “Al purismo estridente del punk, el postpunk le opuso eclecticismo e hibridez. Y a su tradicionalismo roquero, un imperativo de cambio constante”.

Artículo anteriorMónico Ávila
Artículo siguientePrograma Especial para Obtención de Plazas Académicas y Administrativas