En los últimos días se ha escuchado mucho sobre estos chicos que se hacen llamar “emos”, caracterizados por un atuendo entallado de color negro y pelo largo cubriendo parte de su rostro, esta forma de andar por las calles por parte de los emos, ha provocado la ira de otros grupos sociales que habitan las ciudades…
Dicha situación nos revela la falta de tolerancia a la que estamos sometidos en la metrópoli, una inconsciencia social evidente. Las agresiones de las que han sido objeto los emos, es una muestra de la falta de educación y respeto a las diferentes manifestaciones sociales. Pero quiénes son “los agresores” para decir a las personas qué hacer y cómo vestir, cuando ellos mismos son parte de otros grupos sociales, y a fin de cuentas todos estos grupos formamos la sociedad. Qué pena de verdad que existe tanta intolerancia, que no podamos vivir en un ambiente de convivencia más amable y de respeto.
Invito a todos los ciudadanos a levantar la voz en pro de la legalidad, del buen trato, de apoyo a la naturaleza, de respeto hacia los demás y ya dejarnos de conflictos banales que sólo muestran lo más bestial de nuestra naturaleza humana y lo que provocan es dejar de lado lo verdaderamente importante… ¿no creen?