La creación de la Beca Internacional de Cine Jenkins-Del Toro fue anunciada luego de la firma de un convenio entre la Fundación Mary Street Jenkins, la Fundación Universidad de Guadalajara y el Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG), además de que se dio a conocer la llegada a Guadalajara de la exposición Guillermo del Toro: en casa con monstruos para el 2019.
El presidente del FICG, Raúl Padilla López, explicó que la beca se otorgará cada año en el marco del festival a jóvenes mexicanos para que cursen estudios en las mejores instituciones del mundo.
“La Fundación Mary Street Jenkins es una de las instituciones filantrópicas más importantes de México, que desde hace más de sesenta años apoya a la población mexicana a través del impulso a programas de educación, cultura, salud y deporte. Este proyecto trata de una beca que durante los próximos diez años se otorgará a jóvenes creadores de origen mexicano. La beca que se entregará cada año en el marco del festival consistirá en un máximo de sesenta mil dólares anuales para cubrir todo lo que requiere un estudiante y se otorgará por cuatro años”.
En cuanto a la exposición, dijo que ésta reúne a más de quinientos dibujos, pinturas, maquetas, estatuas, fotografías, vestuarios de la colección personal del cineasta, que además incluye numerosas referencias a su obra cinematográfica y que ofrecerá un recorrido por la literatura y el cine de terror que lo han inspirado desde su infancia.
Esta exposición se ha presentado en el Museo de Arte del Condado de Los Ángeles, así como el Instituto de las Artes de Minneapolis y la Galería de Arte de Ontario. La curaduría correrá a cargo de Eugenio Caballero, destacado director artístico.
“La sede será el Museo de las Artes de la Universidad de Guadalajara, que la recibirá de marzo a julio de 2019, con lo que iniciaremos la edición 34 del festival y posteriormente se presentará en la Ciudad de México”.
Guillermo del Toro señaló que su deseo siempre ha sido no sólo crear cine, sino promoverlo, ya que viene de una generación que nació entre dos generaciones, en un momento adverso para el cine.
“Ahí era rendirse o lanzarse, y decidimos lanzarnos, para mí desde entonces hasta horita es un solo sentido. No es hablar de mis películas, sino mostrar las diferentes influencias que han creado una forma de imaginación particular, legitimar el arte narrativo, popular.
El motivo de la beca es porque creo que lo que realmente se queda es lo que uno entrega a quien viene detrás. Hay dos tipos de capital: el temporal y el histórico, el temporal es mientras vives, ése se va, y el histórico es el que con urgencia tenemos que seguir acrecentando. El que cambia una vida, cambia una generación”.
