Existen trabajadores de cruceros, mejor conocidos como limpiaparabrisas, que se localizan en los cruceros más transitados de la Zona Metropolitana.
Para muchos de éstos, ser limpiaparabrisas es su trabajo de tiempo completo, del cual dependen en ocasiones familias completas y por dicha actividad perciben más que el salario mínimo contemplado.
Pero es lamentable que en la mayoría de los casos existen infantes que no asisten a algún plantel educativo y esto da como resultado que tales niños no tengan un mejor futuro. Asimismo, estos infantes frecuentemente consumen —a muy temprana edad— alguna droga, convirtiéndolos en muchos de los casos en adictos.
Sería bueno que los gobiernos de los ayuntamientos tomaran cartas en el asunto para que estos infantes reciban educación en algún plantel educativo, para que con ello tengan un mejor futuro.
