Cada esquina del Paseo Literario Fray Antonio Alcalde emite un susurro que queda en la memoria de quienes por ahí caminan. Se trata de ideas que confrontan, pero también reconfortan, en torno a la cultura y la vida misma.
Un golpe de vista basta para que todo transeúnte conozca los pensamientos de escritores y escritoras que han marcado a Jalisco, consignados en frases plasmadas en placas colocadas en las dos caras de las fuentes de dicha vialidad.
Este miércoles fueron inauguradas 52 más de esas obras (en total ya son 104), como parte del programa de Urbaliteracidad del Instituto Transdisciplinar en Literacidad (Itrali), del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD).
Además, se inauguró la muestra Acuarela de luz, esto es Jalisco, integrada por 75 obras del artista Jorge Monroy, acompañadas de textos poéticos del escritor Jorge Souza Jauffred, en la Plaza Reforma del Paseo Alcalde, justo enfrente de la Casa de los Perros.
Dentro de un mes las obras sarán trasladadas a la Plaza de Armas de Guadalajara, donde podrán verse hasta el 15 de diciembre. Ambas expresiones artísticas forman parte de las actividades que el CUAAD emprende, junto con el ayuntamiento de Guadalajara, la Fundación Paseo Fray Antonio Alcalde, el Seminario de Cultura Mexicana, artistas y organizaciones, con el objetivo de acercar la cultura a la ciudadanía.
Jorge Souza Jauffred dijo que estas actividades culturales “son motivo de celebración, porque es el acercamiento entre las personas que caminan cotidianamente por las avenidas de la ciudad y las palabras de 104 autores de Jalisco impresas en hermosas placas. Ahí, las voces de nuestros escritores quedarán presentes recordando nuestra identidad y enriqueciendo nuestra memoria”.
El Rector del CUAAD, Francisco Javier González Madariaga, agradeció los esfuerzos realizados desde el Itrali, y dijo que “desde la Universidad de Guadalajara estamos satisfechos de que la colaboración con el gobierno de Guadalajara siga vigente para promover el arte, la cultura y la urbaliteracidad (incluso después de las actividades de Guadalajara Capital Mundial del Libro)”.
El artista Jorge Monroy, quien egresó de la Escuela de Artes de la UdeG hace 50 años, destacó que las acuarelas que se muestran son de paisajes naturales, rurales y urbanos de las 12 regiones de Jalisco, creadas en el sitio.
“Desde 1976 me invitaron a publicar mis acuarelas en El Informador; yo tenía libertad de ir a donde quisiera y pintar lo que quisiera. Fueron 44 años de publicar ininterrumpidamente una acuarela, e hice más de 2 mil (de paisajes de todo el país). De Jalisco tenemos 250, pero seleccionamos 75 para la muestra”, informó.
Souza Jauffred recordó que con estas iniciativas de arte se recuerdan los 200 años de Jalisco como entidad federativa.
El Presidente Municipal de Guadalajara, Pablo Lemus, reconoció que la labor coordinada del gobierno con la sociedad organizada y la UdeG es importante para contribuir en que el Paseo Literario Fray Antonio Alcalde se consolide como un patrimonio cultural.
Explicó que el pasado viernes, con apoyo de los regidores del ayuntamiento tapatío, se signó una iniciativa ciudadana para regular que en el Centro Histórico se generen espacios culturales y se proteja a través de un reglamento municipal.
“Este Paseo Alcalde queda como patrimonio cultural del municipio, este paseo cultural ha quedado protegido por los reglamentos del ayuntamiento y tiene la visión de tomar todas las decisiones que, independientemente de quien gobierne, se deberá seguir esa gran visión por los próximos 19 años (cuando se cumplirán los 500 años de la fundación de Guadalajara)”.
De paseo por las memorias de creadores jaliscienses
En un recorrido por las placas de las fuentes, autoridades del CUAAD y del ayuntamiento tapatío visitaron la del escritor Tufic Marón (1929-2003), ubicada en el cruce de Paseo Alcalde y Herrera y Cairo, en presencia de sus hijas Florencia y Julieta Marón. La pieza reza: “Vengan sombras del mundo, canten conmigo la esperanza hasta que la sombra nos marchite”.
Otra ubicada en el cruce con Joaquín Angulo es la placa de Margarita Méndez López (1915-1985), primera investigadora del teatro en Jalisco. En su placa dice: “Yo aprendí a despertar, a gatear y a caminar escuchando partituras de Bizet”.
La Directora de la Biblioteca Iberoamericana Octavio Paz, Carmen Villoro, mencionó que era hija de un director de orquesta y su madre era vestuarista de ópera, con una vida muy interesante.
“Ya se imaginarán el ambiente en que creció esta niña, con músicos y actores. En esa época en Jalisco se llevaban esas funciones en ferrocarril, por eso escogimos esa frase de ella, por el ambiente musical en el que creció. Ella se dedicó a escribir sobre teatro y música”, contó.
La historia de Margarita Méndez López forma parte de la compilación del libro Niñas jaliscienses que lograron sus sueños, editado por Letras para Volar.
Las placas de los escritores jaliscienses forman parte del proyecto Urbaliteracidad que emprende el Itrali del CUAAD, además de las bancas en forma de libros que están intervenidas con motivos literarios.