El rector de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Ricardo Villanueva Lomelí, apadrinó a 256 abogados generación 2018-A -2022-B, egresados del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), en ceremonia que tuvo como sede el Teatro Diana.
Al brindar un mensaje a los recién egresados compartió la importancia para un docente de que lo inviten a que una generación lleve su nombre, ya que es uno de los honores más grandes que se pueden recibir.
“La única cosa que me falta en la vida es vivir lo que están viviendo sus papás, vivir este momento con mis hijas y quizás sus papás y parejas estén disfrutando más este momento que ustedes”, señaló.
Villanueva Lomelí hizo entrega de un vaso con la frase: «Los humanos ya no tienen tiempo de conocer nada, lo compran todo hecho en las tiendas y como no hay tiendas que vendan amigos los humanos ya no tienen amigos», del libro El Principito, por lo que exhortó a los universitarios a cuidar, proteger y valorar a los amigos y buscar ser muy felices.
El Rector del CUCSH, Juan Manuel Durán Juárez, dijo que para la universidad es siempre una oportunidad poder trasmitir esta experiencia y sapiencia que tiene, en lo que al derecho corresponde, una de las carreras fundadoras que a lo largo de dos siglos ha producido abogados importantes en la historia del país.
“En la historia de la abogacía en la universidad han habido importantes abogados litigantes, funcionarios, gobernadores, ha sido un semillero importante de la formación jurídica y de valores jurídicos. Sin duda la Universidad de Guadalajara se ha puesto al servicio de los más débiles. Es muy importante el esfuerzo que logran porque es el inicio de una actividad profesional”, señaló.
Carlos Ramiro Ruiz Moreno, director de la División de Estudios Jurídicos del CUCSH expresó que hoy se materializan los propósitos formativos de un grupo de jóvenes bachilleres que hace cinco años decidieron libremente abrazar la sublime profesión de la abogacía.
“Exhorto a nuestros egresados para seguir trabajando en su formación y actualización profesional, que no culmina con sus estudios de licenciatura, y que lo sigan haciendo a merced de la confianza que puede darles el respaldo de los profesores de la división de estudios jurídicos”, señaló.
Rocio Atziri Cardozo Sandoval, presidenta de la generación, expresó que durante mucho tiempo se preguntó sobre las palabras correctas para decir en estos momentos y concluyó que no hay nada mejor que decir lo que sale del corazón.
“Me siento orgullosa de todas y todos, lo hemos logrado, después de tanto sacrificio. Sin duda fuimos una generación de retos, no enfrentamos a cosas que jamás habíamos imaginado. El miedo a muchos nos superó y por bastante tiempo son sabíamos qué pasaría. En las calles había un virus que paralizó al mundo, con esto tuvimos que adaptar nuevas formas, métodos y no todo fue malo, nos volvimos seres más humanos, sensibles y empáticos”, comentó.
Durante la ceremonia se realizó la entrega de pergaminos post mortem a familiares de los estudiantes Estefanía Aguilera Cárdenas, Juan Pablo Miguel Cabrera Martínez y Gibran Uriel González Barajas, mismos que recibieron un minuto de aplausos.
El reconocimiento Mariano Otero a la excelencia académica fue entregado a Renata Orozco Martínez, Jesús Daniel Cabrera Sígala, Exiquio Javier García Cruz, Yesenia Barajas Pichardo, Noemí Alexa Mora Ledezma, Fernando Molina Sanchez, Karla Robles González, Roberto Ortiz Martínez, Sídney Capilla Arámbula, Itzayana Cervantes Sánchez y a Bertha Díaz Pérez.
Con el reconocimiento Ignacio L.Vallarta a los académicos fueron distinguidos María Eugenia Pérez Santana, Alicia Livier Estrada Gutierrez, Álvaro Ruvalcaba Ascencio, Guido Bugarín, Jesús Francisco Ramírez Estrada, Jesús Franco Anaya, José antonio Camacho Gómez, José de Jesús Becerra Ramírez, Julio Panduro Casillas, Luz Elena Argote Michel, Miriam Tello Bañuelos, Rodolfo Guerrero Parra, Sergio Israel Quiñones Rodríguez y Carlos Eduardo Moyado Zapata, fallecido recientemente.