Aprueba CUPIA-ANUIES Declaración de Acción ante cambio climático

Entre las acciones destacan la incorporación de contenidos ambientales en planes de estudio, líneas de investigación, transición energética y desarrollo de museos, bibliotecas y jardines botánicos

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Fotografía: Gustavo Alfonzo

El Consejo de Universidades Públicas e Instituciones Afines (CUPIA), de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), aprobó la Declaración Guadalajara por el medio ambiente, mediante la cual las instituciones se comprometen a cumplir propósitos y acciones ante el cambio climático y la pérdida de biodiversidad.

 En la declaración, aprobada en la Sesión LVIII del CUPIA, celebrada en el Conjunto Santander de Artes Escénicas (CSAE) de la UdeG, se estableció el compromiso para que las casas de estudio sean agentes de cambio positivo en materia de mitigación y adaptación al cambio climático y a la pérdida de biodiversidad para evitar que se ponga en riesgo nuestra supervivencia como especie.

Entre los riesgos se encuentran la contaminación y el calentamiento atmosférico, oceánico y  terrestre; la deforestación, el aumento en la frecuencia y tamaño de enfermedades infecciosas causantes de epidemias y pandemias.

Además, las universidades e instituciones de educación superior contribuyen al diseño de nuevas políticas públicas, la generación de innovación científica, tecnológica y social necesarias para afrontar los retos que implica el cambio climático.

Ante lo anterior, se promoverá el estudio, la generación de evidencia oportuna y su difusión de las emergencias socio-ecológicas y climáticas.

Fotografía: Gustavo Alfonzo

Para lograr los propósitos, el CUPIA estableció las siguientes acciones: 

  1. Promover el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) propuestos por la Organización de las Naciones Unidas.
  2. Incorporar en los planes y programas de estudio, de manera transversal, contenidos relacionados con el entendimiento, mitigación y adaptación al cambio climático y la sostenibilidad ambiental.
  3. Desarrollar líneas de investigación interdisciplinarias con una visión global y una práctica local, orientadas hacia la solución de problemas concretos en materia de cambio climático.
  4. Diseñar y poner en práctica estrategias de difusión y sensibilización social sobre los riesgos que implica el calentamiento global y la pérdida de biodiversidad.
  5. Fortalecer las acciones que impulsen la transición energética hacia fuentes sostenibles en nuestras casas de estudio para que, paulatinamente, nuestros ámbitos educativos se conviertan en modelo de gestión integral y sostenible de la energía, el agua, los residuos sólidos, los contaminantes líquidos y gaseosos, y los espacios naturales.
  6. Fomentar el desarrollo y el uso de las instalaciones educativas como bibliotecas, museos y jardines botánicos, entre otros, para la divulgación de la ciencia y la educación ambiental, con compromiso hacia la problemática del cambio global.

La profesora-investigadora de la UNAM, Julia Carabias, mencionó que las soluciones existen, pero se deben implementar en todas las escalas y por los actores idóneos superando la visión biológica e integrando los aspectos económicos, políticos y sociales.

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