Identificar un destello blanco en las pupilas de niños y niñas, es suficiente motivo para que sean llevados a una revisión oftalmológica urgente, puesto que ese síntoma podría tratarse de retinoblastoma, un tumor maligno con el que se nace y que puede manifestarse a partir del primer año de edad.
Estos casos de cáncer de ojo han presentado un aumento, a decir de doctora Graciela González Pérez, encargada de la Clínica de Retinoblastoma del Servicio de Oftalmología del Antiguo Hospital Civil de Guadalajara Fray Antonio Alcalde.
“Actualmente veo a 20 pacientes por mes, entre los de primera vez, que son alrededor de dos por semana, y los subsecuentes. Anteriormente no era tan frecuente, por eso les queremos insistir a que vayan a revisarse. Llevo tres años notando que se está incrementando cada vez más”, declaró.
“El retinoblastoma es el tumor maligno dentro del ojo más frecuente en la infancia –añadió–. Se han reportado hasta 67 casos por millón de nacidos a nivel global, y en México se presentan seis casos por cada millón de niños”.
“El tumor se manifiesta a través de la pupila del niño a partir del primer o segundo año de vida, es la edad principal; pero recibimos pacientes de 9 y 10 años que también tienen retinoblastoma. Pero también se puede manifestar con estrabismo”, explicó.
Destacó que actualmente 60 por ciento de los que llegan a consulta tienen retinoblastoma avanzado y pierden el ojo afectado. Por ello, es importante que padres de familia estén atentos y que desde el primer mes de vida del bebé acudan a un tamizaje visual. Otro síntoma puede ser que alguna de las pupilas se vea más brillante que otra. “Las pupilas deben ser rojas y simétricas, si hay una diferencia en color, si una está más oscura o desviada, deben de acudir de inmediato con el médico”, resaltó.
Este llamado se hace a propósito de la Semana Mundial de Concientización sobre el Retinoblastoma, que se celebra desde el segundo domingo de mayo de cada año y que inició en España en 2021.
“En el HCG tenemos la mayoría del equipamiento especializado para tratar el retinoblastoma. Queremos unirnos a esta causa para hacer conciencia de este mal que es poco conocido por la población”, informó.
La especialista dijo que este tumor es de nacimiento y se puede deber a temas diversos que van desde la falta de atención en el embarazo, la contaminación en el medio ambiente, insecticidas, pero también por herencia. “En 40 por ciento de los casos los niños lo tienen porque sus padres o abuelos tuvieron retinoblastoma”, subrayó.
Además del HCG, donde el tratamiento de dicha enfermedad es gratuito para quienes son habitantes de Jalisco, González Pérez atiende en Grafeland Óptica Infantil, ubicada en Plaza Pabellón, donde también da atención y prevención del retinoblastoma.
Una vez identificado el tumor, ¿qué ocurre?
González Pérez informó que si el tumor identificado es tratable y salvable (que no presente un gran tamaño), el niño pasa a quimioterapia sistémica al Centro de Atención Integral de Oncología y Hematología Pediátrica del HCG; después de dicha terapia el tumor se reduce.
Si no se inactiva, dijo, se aplica un tratamiento local de láser o criocoagulación o quimioterapia inyectada dentro del ojo. “El HCG es la única institución donde se aplica la quimioterapia inyectada”, dijo.
“Si se acude con un oftalmólogo rápidamente al detectar una pupila blanca los ojos se pueden salvar. Desgraciadamente, cuando tardan, lo único que podemos hacer es extirpar el ojo, de lo contrario el cáncer ataca el sistema central y el niño muere”, mencionó.
La jefa del Servicio de Oftalmología del Antiguo HCG, doctora Miriam Guadalupe Becerra, informó que cada año atienden a hasta 50 mil pacientes, de los cuales 15 por ciento son niños y niñas.
Se hacen alrededor de 3 mil 800 cirugías, y un promedio de 18 mil procedimientos y estudios oftalmológicos por año.