Bienvenida del Rector general maestro Carlos Briseño Torres al ciclo escolar 2008-A.

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Compañeros universitarios:

Desde la Escuela Preparatoria número 2, expreso a todos los miembros de la comunidad universitaria la más cordial de las bienvenidas al ciclo escolar 2008-A.
Como ustedes saben, nuestra institución ha venido consolidándose paso a paso para hacer realidad el derecho de miles de jaliscienses a la educación. Esto no es, por supuesto, logro del actual Rector General de la Universidad de Guadalajara. Somos muchos los miembros de varias generaciones quienes hemos trabajado para tener una universidad cada día mejor.
La nuestra es una institución que ha logrado consolidarse transitando en ocasiones con dificultad, y con holgura en otras, pero siempre hemos buscado obtener mayores recursos de los gobiernos estatal y federal para hacer posible el sueño de muchos jaliscienses de estudiar en la Universidad de Guadalajara.
La universidad pública de Jalisco ha pasado por muchas etapas y siempre ha sabido estar a la altura de las circunstancias. Aquí en la Universidad de Guadalajara hacemos acopio de la tradición y de la fortaleza que nos da nuestra historia para seguir cambiando y mejorando en un clima de paz y armonía.
Somos una comunidad universitaria amplia y plural, con diferentes puntos de vista, que se manifiestan siempre en un marco de tolerancia; convivimos haciendo posible que la institución sea una de las mejores universidades públicas del país.
La Universidad de Guadalajara ha podido avanzar gracias a la unidad interna; gracias a que siempre ponemos por delante el objetivo institucional de mantener muy en alto las banderas de la laicidad, la gratuidad y la cientificidad de los estudios.
El crecimiento de la matrícula tiene que ser sostenido, pero también sustentable. Es decir: no podemos abrir indiscriminadamente las puertas en demérito de la calidad educativa. Necesitamos encontrar, de manera cada vez más precisa, el justo medio entre cantidad y calidad. Porque tan legítimo es el derecho de los jóvenes, los padres de familia y la sociedad jalisciense por contar con más espacios en la Universidad de Guadalajara, como lo es el derecho de la comunidad universitaria a no ver disminuidas y devaluadas sus condiciones de estudio y de trabajo.
Nuestra institución tiene el gran reto de generar más espacios para ampliar su cobertura. Por eso, con base en nuestros indicadores de desempeño y calidad, hemos gestionado más recursos ante los gobiernos federal y estatal para ampliar la matrícula en licenciatura y postgrado, pero también en nivel medio superior.
En el nivel medio superior necesitamos lograr la cobertura universal en el bachillerato mediante un Plan Estatal de Cobertura y calidad. La Universidad de Guadalajara no puede ser la única responsable de dar cobertura universal.
El hecho de que muchos jóvenes y sus padres prefieran que sus hijos estudien en una preparatoria de la Universidad de Guadalajara, ante otros tipos de bachillerato en el Estado, no significa que solo deba haber preparatorias de la Universidad de Guadalajara, pero sí la sociedad quiere más preparatorias de nuestra institución los gobiernos federal y estatal deben aportar más recursos para cumplir y satisfacer esa demanda creciente, hasta que juntos: Universidad de Guadalajara y otros sistemas de bachilleratos del Estado cumplamos la Ley de Educación que establece un ciclo básico obligatorio de 12 años, lo cual incluye al bachillerato.
Para tener mejores alumnos en licenciatura y por tanto mejores egresados de las licenciaturas y postgrados de la Universidad; para seguir teniendo más programas de licenciatura acreditados por su calidad, necesitamos hacer todavía mejor las cosas en el bachillerato. Ahí está la piedra angular de la gran Reforma y del gran salto cualitativo que tiene que dar la Universidad de Guadalajara.
Heredamos una gran institución para hacer mejor las cosas en estos seis años; para consolidar esta gran universidad y entregar a la siguiente generación de directivos una mejor universidad de la que yo recibí el primero de abril de 2007.
La clave ahora está en la competitividad. El reto para los jóvenes, es que se preparen mejor en esta fase de estudios, en este periodo entre los 15 y los 18 años; en donde en ocasiones se toma la ruta falsa de las drogas y el alcohol, contra la ruta del estudio y la preparación que, finalmente, da mejores resultados.
Por eso es tan importante nuestra responsabilidad como formadores de jóvenes entre 15 y 18 años, la edad más difícil de la vida; por ello debemos revisar si estamos haciendo bien las cosas y en su defecto: mejorarlas.
Actualmente el Sistema de Educación Media Superior se encuentra en la fase final de elaboración de un nuevo plan de estudios del bachillerato el cual vamos a someter este mismo semestre ante la Comisión de Educación del Consejo General Universitario.
Queremos que a los mil 200 profesores del bachillerato que ya tienen maestría se sumen cientos de profesores más; que a los 30 profesores con doctorado se sumen muchos más; que no haya un sólo profesor en el bachillerato que no cuente como mínimo con título de licenciatura y, de preferencia, de maestría. Para ello vamos a seguir apoyando a nuestros profesores a mejorar su perfil académico y adquirir nuevas herramientas para que esto se refleje en mejores condiciones para el aprendizaje de los estudiantes.
Muchas gracias.

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