Luego de que el año pasado el huracán “Lidia” arrasara con las instalaciones del campamento tortuguero La Gloria, desde hace unas semanas ha sido puesto en operación por parte de académicos y estudiantes del Centro Universitario de la Costa Sur (CUCSur) de la UdeG, con la protección de alrededor de 50 nidos al día.
A decir deJosé Antonio Trejo Robles ahora se cuenta con instalaciones renovadas, con pocos detalles por concretar. “Ya empezamos las actividades, y aunque aún no está listo para recibir a visitantes, tenemos ya los requerimientos para que estén médicos, un técnico y la gente de la comunidad”, dijo.
Recordó que el huracán dejó prácticamente destruido este campamento ubicado en la costa de Tomatlán, a un costado del estero El Chorro. De hecho, antes de “Lidia”, una crecida de dicho estero ya les había afectado el corral de intubación.
“Todo se nos tiró; este campamento estaba hecho con vara, que se llama pajarete, y barro; cada año teníamos que repararlo; perdimos todo, alrededor de 70 a 80 por ciento de los nidos, entre 3 mil a 4 mil. También perdimos una moto, lo que hizo que no hiciéramos los patrullajes usualmente”, dijo el académico.
Sin embargo tuvieron apoyo de la Rectora del CUCSur, Ana María de la O Castellanos Pinzón y del Rector General de la UdeG, Ricardo Villanueva Lomelí.
“Este campamento ya fue prácticamente una reconstrucción completa, quedó muy bien, ahora está mejor construido, las instalaciones son mejores; tenemos cocina, baños, regaderas y luz”, mencionó.
Por temporada, en el campamento de La Gloria se protegen de 7 mil a 8 mil nidos.
La labor de proteger a la tortuga desde la UdeG
Desde 1985 la UdeG ha trabajado por el rescate de las cuatro especies de tortugas marinas que desovan en las costas de Jalisco: Lepidochelys olivacea (golfina), Dermochelys coriacea (laud), Eretmochelys imbricata (carey) y Chelonia agassizi (prieta).
En casi 40 años se han protegido 11 millones 861 mil 070 huevos. en 129 mil 402 nidos y liberado 129 mil 402 crías. Esto, a través de cinco campamentos tortugueros de la UdeG que están en cinco playas: en Barra de Navidad; en Playa El Coco; el Hotel Quinta de Cuastecomates; el Arroyo Seco y La Gloria.
Recordó que tanto los académicos como personas de las comunidades que apoyan en el rescate de las tortugas están organizados en comités de vigilancia ambiental certificados por la Profepa; esto avala protocolos de manejo de la especie.
Según estudios que se han realizado, en los campamentos se mantiene el saqueo de nidos, pero también el aumento de depredadores que consumen los huevos de tortuga, ya que se trata de animales que han sido desplazados por los cambios de uso de suelo en la costa jalisciense.
“De mil tortuguitas que liberamos, posiblemente de cuatro a cinco lleguen a ser adultas”, recalcó Trejo Robles, quien aseguró que estas amenazas suman a que las especies continúen en peligro de extinción.
Otro problema es la contaminación por plásticos. El académico explicó que hace ocho años analizaron el contenido estomacal de 97 tortugas hembras, de las cuales en 48 encontraron pedazos de plástico. Mencionó que actualmente tienen 15 estómagos guardados para volver a analizar la presencia de ese contaminante.
Los avances de dichas investigaciones que se hacen desde la licenciatura en Biología Marina se difunden en congresos, publicaciones e incluso en talleres del Festival Papirolas, que llegan a diferentes planteles de la UdeG en Jalisco.