Una de las responsables de esta iniciativa, María Felícitas Parga Jiménez, directora de la División de Ciencias Económicas, Empresa y Gobierno (CUTonalá) explicó que esta certificación es un mecanismo que organizaciones, instituciones o empresas adoptan de manera voluntaria para obtener un reconocimiento como centro de trabajo que cuenta con prácticas en materia de igualdad laboral y no discriminación, las cuales deben favorecer el desarrollo integral de sus colaboradoras y colaboradores y es otorgado por el consejo interinstitucional que se integra por el Instituto Nacional de las Mujeres, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación y la Secretaría del Trabajo y Previsión social.
“El CUTonalá decide tener un seguimiento de una política institucional declarada de la Universidad de Guadalajara y de la propia misión y visión del centro universitario y trabajar con miras a esta certificación, con el objetivo de no sólo declarar una política, sino llevarla a la práctica en su comunidad”.
Los objetivos que la norma persigue son principalmente promover una cultura laboral donde el sexo, la edad, la discapacidad, la salud, cualquier tipo de condición o característica de las personas no sea un obstáculo para la inclusión laboral y donde la responsabilidad social de los centros de trabajo llegue a los sectores más desfavorecidos.
“Incorporar la perspectiva de género y no discriminación principalmente en los procesos de reclutamiento, selección, movilidad y capacitación de personal, garantizar igualdad salarial, implementar acciones para prevenir y atender la violencia laboral, lograr una corresponsabilidad entre la vida laboral, familiar y la vida personal de las y los trabajadores”.
La académica explicó que por medio de esta norma el centro busca disminuir la incidencia de prácticas discriminatorias y violencia que pudieran darse en el centro universitario, hasta erradicarlas, fomentar un ambiente de trabajo sano, armonioso y competitivo.
“Para lograr esto dictamos una propia política de igualdad laboral y no discriminación y es la que rige todas las acciones y procedimientos que dan continuidad al cumplimiento de la política. La certificación es una responsabilidad, un compromiso del día a día, no podemos esperar a que llegue el 2025 cuando se dé una nueva evaluación, esto se va construyendo todos los días y lo hemos construido en tres años”.
Karla Contreras Tinoco, Coordinadora de Planeación en CUTonalá y otra de las responsables del proyecto, dijo que la certificación tiene una vigencia hasta el 2025 y destacó que el centro, desde su plan de desarrollo, ha priorizado y ha dado cuenta de que está comprometido con la igualdad, con la responsabilidad social, con la cultura de paz.
“Esta certificación es muy importante porque es la evidencia de las acciones que se están emprendiendo por miembros de la comunidad universitaria para alcanzar la igualdad y no discriminación, es algo que se está realizando en el centro en lo cotidiano y con la certificación damos cuenta de que estos valores están en la práctica”.
Explicó que en 2025 se haría una nueva evaluación para continuar con la certificación, lo que los motiva y sobretodo compromete a seguir trabajando y a emprender acciones desde distintas áreas de manera constante, para el efectivo cumplimiento de la política.
“El logro de esta certificación implicaba un compromiso de distintos actores de todos los niveles, es un compromiso constante, se dice fácil una certificación, pero significa una serie de proyectos que se están implementando. Ya existe un grupo técnico que va a fungir como comité de vigilancia, que va a estar generando y acompañando las acciones en torno a la igualdad laboral”.
Señaló que previamente se llevó a cabo una evaluación del clima laboral y se realizaron acciones como la instalación de una sala de lactancia, se llevaron a cabo cursos de capacitación, de sensibilización y en materia de lenguaje inclusivo.
“Son actividades en las que nuestros miembros de la comunidad están participando, es un compromiso en varias aristas, desde la capacitación, formación docente, directiva, administrativa, adecuación de infraestructura, construcción de documentos. Una serie de acciones constantes consecutivas que estamos implementando para asegurar que las y los trabajadores puedan contar con igualdad de oportunidades”.