La comunidad latina en Estados Unidos de América (EUA) ha sido una de las más afectadas durante la pandemia por COVID-19, pues sus miembros son quienes han tenido que sacar adelante los trabajos básicos de limpieza y preparación y distribución de alimentos, además de que muchos de ellos carecen de acceso a servicios de salud.
Durante el webinar organizado por la Universidad de Guadalajara (UdeG), y Jalisco a Futuro, con el tema: “Profesionistas expatriados en EUA: Viviendo la pandemia en el exterior”, Judit Arenas, Vicepresidente Senior de APCO Worldwide, quien se dedica a los derechos humanos y radica en Manhattan, Nueva York, declaró que esta afectación a los mexicanos por la pandemia tiene como origen la inequidad en la que viven los migrantes.
“Todo el tema del acceso a la salud, qué trabajos realizaban nuestros compatriotas, los exponían mucho más, y veíamos que proporcionar información válida ha sido uno de los temas que más les ha afectado”, explicó.
Recalcó que la pandemia reveló la inequidad en la que se encuentran muchos sectores de la sociedad estadounidense, y puso de manifiesto la importancia de quienes realizan trabajos de limpieza, de preparación y entrega de alimentos.
“Pienso en los restaurantes y en toda la gente que limpia y que, en cierto punto, son los héroes que mantuvieron a esta ciudad viva. Podrá ser que la comunidad mexicana, latina y afroamericana haya sido la más afectada, pero, por otro lado, esas personas que entregan comida, que trabajan en los súper, el personal de intendencia, cuando la ciudad vuelva a ser el Nueva York que conocemos, esa imagen se nos quedará con un poco más de respeto y reconocimiento a los que hacen que todo funcione”, expresó.
Marcos Cline-Márquez, productor ejecutivo de Altered L.A. con sede en Los Ángeles, California, recordó que los migrantes viven en hacinamiento, en casas o departamentos en los que habitan dos o tres familias, por lo que el distanciamiento social no puede ser posible para ellos, por lo cual han sido impactadas con muchos casos de contagio.
Explicó que el Estado de California aprendió de lo que sucedido en Nueva York en términos de atención en salud y aislamiento, además de que hay una menor densidad de población que en la ciudad neoyorquina; sin embargo, las muertes siguen a la alza, se mantiene el cierre de muchos espacios públicos y la educación sigue siendo vía remota.
Juan Massey, socio de McCabe CPA & Consulting Group, LLC., coincidió con
los especialistas sobre el hecho de que al igual que en México, las autoridades han dado un uso político a todo lo relacionado con la pandemia, los cuidados y las medidas sanitarias que se han implementado a raíz de ella.
Las libertades y el respeto irrestricto a los derechos ciudadanos han propiciado que muchas personas se escuden en ellos para no utilizar cubrebocas y romper las órdenes de quedarse en casa, aseguró.
“Hay ciertas personas que se adhieren a esta ideología, que deciden que el gobierno está exagerando el fenómeno, que está mintiendo y que todo es un complot para apoderarse de las libertades individuales y restringir la libertad de la población, entonces deciden no tomar ese tipo de medidas y eso ha tomado un tinte político”, señaló.
Rodrigo Aguilar, fundador de North American Project, coincidió en que la raíz de que EUA sea el país con el mayor número de contagios y muertes está en el sistema de salud y hospitalario, al que no todos tienen acceso, y a la manipulación política.
“Los factores culturales también están implícitos en las decisiones de la misma población de no hacer caso a las recomendaciones de las autoridades, ahí reside una parte importante que también vivimos en México y que se vive en España, Italia y Brasil, donde la misma ciudadanía, aunque le des datos, información y guías, opta en no hacer caso a las recomendaciones de usar cubrebocas, no hacer reuniones sin sana distancia. Parte de la explicación es porque la población no cree en la autoridad, hay una desconfianza que viene arrastrando desde hace varias décadas”, concluyó.