CUValles forma personas con un alto grado de responsabilidad, comprometidas con su sociedad y entorno. El Ciudadano Promesa está comprometido con su grupo social, es responsable, con habilidades, capacidades y destrezas que le fortalecen frente a su entorno, para identificar aquellos problemas que aquejan a su comunidad, y que a partir de un esfuerzo colectivo y participativo es capaz de proponer proyectos y soluciones, aplicando los conocimientos adquiridos en su formación universitaria.
Es un ciudadano crítico, autosuficiente y práctico, con un alto grado de civilidad, consciente de su alrededor, para relacionarse de manera horizontal con los miembros de su localidad, expresó Hilda Eliazer Aquino López, coordinadora del programa Valles Valgo Desarrollo Regional, Visión 2030.
Promesa hace referencia al Programa de Mejoramiento para Estudiantes Autogestivos, implementado en el CUValles, y tiene como objetivo potenciar los cuatro alfabetismos básicos para el desarrollo de la estructura cognoscitiva, para potenciar la formación del individuo crítico, y son: la lengua materna, la lengua extranjera (en este caso el inglés), el lenguaje digital y el lógico-matemático.
Para este fin, CUValles retoma la metodología del aprendizaje dirigido a proyectos liderados por científicos, en colaboración con los estudiantes y la sociedad; así surge la metodología denominada Proceso (proyectos+científi-cos+estudiantes+sociedad). Bajo esta premisa se da el acercamiento a las comunidades.
Con esta metodología se pretende que los conocimientos adquiridos en el aula, no sólo tengan una plataforma cognoscitiva, sino que los alumnos desarrollen actividades para solucionar problemas. Es un movimiento autorecursivo universidad-comunidad, algo real que se aterriza con la reflexión y replanteamiento de acciones que encaminan el proceso, con el fin de eliminar obstáculos y desarrollar un soporte de criticidad en el estudiante.
Mediante el Programa Académico Dinámico (PAD), el CUValles encamina sus esfuerzos para la consolidación del Ciudadano Promesa. En tanto al PAD, permite la formación intencionada al desarrollo de proyectos, con la inclusión en los cuatro alfabetismos; esto es, por un lado sus asignaturas y conocimientos de su campo disciplinar enfocados al desarrollo de proyectos y, por el otro, se apoyan en los subprogramas: Hello (CELEx), Expresa (CELEs), Eureka y e-Volución.
De este modo, la formación de los jóvenes es multidimensional y dinámica, en el sentido en que esperamos sean replanteadas las acciones a partir de la evaluación de lo que se está realizando en los espacios remotos –Casas Valles, ejidos, instituciones públicas y privadas de la región–, y del que resulta una currícula viva, puntualizó la académica.
Los programas: Educación para Todos, Extensionismo Rural, Emprendurismo Social y Medio Ambiente y Salud, brindan al estudiante el campo de acción y lo sitúan en un entorno real, mediante la búsqueda de acertada solución a un problema de su localidad.
Primeros pasos
Hasta el momento, dentro de CUValles, se detectan avances en la formación del Ciudadano Promesa. “Las acciones de los muchachos que han salido a desarrollar proyectos, ya están repercutiendo. Tal es el caso de lo realizado en educación básica ”, indicó la funcionaria Aquino López.
Destaca la participación de los jóvenes en dicho programa, quienes dan muestra de los cambios logrados en cuanto a la conciencia crítica y de lo que se puede obtener con su esfuerzo, en el sentido de la coacción y autogestión, estimando que el impacto de éste será gradualmente mayor.
El “deber ser”
El estudiante formado bajo la premisa del perfil Promesa, es consciente de que comparte con sus semejantes un mismo ecosistema planetario, que debe cuidar y enriquecer. Igualmente es copartícipe de las preocupaciones y esperanzas de todas las sociedades y comunidades del mundo. Se considera miembro de una sociedad global, a la que necesita conocer para aprovechar sus ventajas, para el beneficio de sus localidades más próximas, buscando siempre el bienestar colectivo.
