Ante el escenario incierto que vive el sector turístico, el alza del desempleo y la caída del Producto Interno Bruto (PIB), se estima que a Puerto Vallarta le llevará de tres a cinco años regresar a los niveles de 2019, lo que implica una reconstrucción del sector a partir de esta nueva realidad.
Así lo expresó el Director General del hotel Rosita de Puerto Vallarta, Marcelo Alcaraz González, al participar en el webinar “Las ciudades turísticas ante el Covid-19. Una visión desde Puerto Vallarta”.
“Veníamos de un 2019 en un franco crecimiento en ocupación, tarifas promedio, número de visitantes, y las expectativas de 2020 eran superar el año anterior. Ahora, la hotelería en esta zona está prácticamente cerrada en su totalidad, y todos los prestadores de servicios turísticos sin operar”, declaró.
Dijo que, aunque no se tiene definida una fecha para regresar a la actividad, deben de estar conscientes de que las características del turismo antes del Covid-19 son totalmente distintas a los comportamientos que tendrá el turismo a partir de este momento.
“Tenemos que identificar nuestra nueva normalidad y actuar en consecuencia, enfocándonos en este momento en dos grandes temas: la salud, los turistas tienen miedo de viajar porque pueden contagiarse; el segundo tema es ofrecerles mecanismos que cancelen ese temor con cambios radicales en los procesos de operación, a través de un protocolo que deberemos de implementar como destino turístico, y que no sólo comprende a la hotelería, sino también a restaurantes, tours, transportadores, aeropuertos, centros comerciales y playas”, informó.
Informó que en materia de hotelería, a fines de esta semana concluirán el Protocolo de protección Covid-19, que se complementará con el Protocolo guiado del Consejo Mundial del Viaje y el Turismo, que estará implementado por todos los países que integran el G20; lo cual dará certidumbre y credibilidad; posteriormente, se desarrollará una certificación por un organismo confiable que auditará a cada empresa.
“En habitaciones se replantea la decoración donde menos es más: limpieza, desinfección y sanitización con grado hospitalario. Nuestra camarista portará equipos de protección, el check in estará tendiendo a realizarse a través de la página web, generando una llave electrónica en el celular; la recepción contará con equipos de protección; en alimentos y bebidas continúa la sana distancia; se suspenden los buffetes y se privilegia el servicio a cuarto; se cancelan los servibares y actividades masivas. Esto es sólo un esbozo de la gran transformación que la hotelería tendrá que desarrollar no en el futuro, sino ya en esos momentos. La nueva norma es que todos los procesos reduzcan al mínimo la interacción entre huésped y colaboradores”, informó Alcaraz González.
En materia económica, explicó que la buena noticia es que viajar ya se encuentra en nuestro ADN; por ello, la gente volverá a retomar los viajes, sólo será cuestión de tiempo.
“Se pronostica la reapertura gradual de Puerto Vallarta a partir del 1 de junio. El mercado natural de ese cuatrimestre es el nacional, serán los mercados meta, y debemos de estar conscientes de que la demanda está contraída, por lo que al retomar las tarifas y paquetes a ofertar debemos hacerlos con precios atractivos, pero sin malbaratar el destino”, agregó.
El Director del Centro de Estudios para el Desarrollo Sustentable Turístico (Cedestur), del Centro Universitario de la Costa (CUCosta), Alfredo César Dachary, dijo que este tema es complejo y va más allá de una crisis de sanidad.
“Nos afecta porque el turismo es la representación de viajes, objetos, placeres; los imaginarios de la gente. En medio siglo el turismo creció sin tener ningún tipo de freno; esto va a transformar radicalmente lo que será el turismo del futuro”, dijo.
Precisó que este fenómeno ha hecho olvidar todo lo que estamos viviendo. Los medios se han concentrado en esto y han dejado a un lado los conflictos políticos, económicos y militares que en este momento hay, empezando por la caída en el precio del petróleo, el enfrentamiento China-Estados Unidos y la gran caída económica de las empresas aéreas, que están en quiebra.
“Gran parte del sector hotelero mundial está quebrado; pero todas esas cosas no las están planteando, y lo peor es que detrás de la pandemia se viene la peor de las crisis económicas, posiblemente la más dura”, puntualizó.
El Rector del CUCosta, Jorge Téllez López, declaró que la pandemia ha trastocado la salud pública internacional, ha puesto en verdadero riesgo las condiciones económicas, sociales y de bienestar de la comunidad global, afectando de manera diferenciada a los territorios a partir de las actividades vocacionales de países, estados y ciudades.
“En el caso de Puerto Vallarta, ha sido afectada su principal fuente de trabajo. Es el momento de replantearnos las preguntas tradicionales sobre los modelos de desarrollo económico, organizacional y social de la vida cotidiana en las ciudades. Reflexionemos sobre si las bases establecidas hasta hoy nos dan certidumbre, o tenernos que repensar el quehacer cotidiano, los planes de desarrollo sobre una de las actividades más importantes, el turismo”, dijo.
La investigadora del CUCosta Ángeles Huízar Sánchez dijo que ahora la discusión es cómo recuperar el turismo y reactivar la actividad económica que ha afectado a la comunidad local de los sitios turísticos.
El Secretario Académico del CUCosta, José Luis Cornejo Ortega, señaló que el medio ambiente y el turismo tienen una relación directa, y los recursos naturales se transforman en atractivos turísticos. En este tenor, Puerto Vallarta tiene una vasta riqueza natural.
El Director de Contenido Editorial de Grupo Editorial Televisa, Roberto Morán Quiroz, recordó que la Comisión Europea definió lo que nos espera como una recesión de proporciones históricas, y en Europa están esperando una caída del PIB de 7.5 por ciento.
“Las encuestas de expectativas del Banco de México, que se acaban de publicar esta semana, hablan de una caída de 6.5 por ciento en el PIB en promedio, pero para este segundo trimestre hay un pronóstico de 14 por ciento, una caída que no hemos vivido desde los años 30 del siglo pasado en México. Las perspectivas de la economía no son tan claras porque en México se incluye una complicación extra para el futuro de las inversiones”, expresó.
Informativo 0473
Por: Laura Sepúlveda