Las historias en series y películas aún tienen una deuda con quienes viven las diversidades dentro de la diversidad sexual; no tanto en el caso de varones cisgénero gays, sino más bien quienes enfrentan otras causas, como las personas de la diversidad funcional, mujeres trans y quienes viven con algún diagnóstico.
De esto charlaron el Director del Premio Maguey, Pavel Cortés, junto con cuatro personalidades, en la master class “Dicidencias”.
El activista e influencer Paulo Silva, quien vive con osteogénesis imperfecta y se asume como hombre gay, mencionó que en México hay 22 millones de habitantes que viven en alguna situación de discapacidad, que a diario enfrentan obstáculos en infraestructura y prejuicios.
“Casi no vemos representación en el cine, en la moda. Las historias que cuentan sobre alguien con discapacidad en realidad no la viven. Si no hay actores, actrices que viven con la discapacidad es una representación sesgada”, dijo.
“También soy actor y me he encontrado con trabas en los casting. También se nos representa de forma monstruosa o forma terrible como si tener discapacidad fuera lo peor que les pasara en la vida”.
Por su parte, Andoeni Padilla, del equipo de realizadores del documental Corazón de centinela, que cuenta la resistencia contra la pandemia del VIH en Jalisco desde la asociación civil CHECCOS, refirió que en las series y películas el tema de los diagnósticos ha sido fatal.
“Nuestra educación sexual ha sido terrible y deplorable porque Jalisco sigue siendo un estado conservador”, explicó.
“Vi una entrevista de Victor, director de CHECCOS, de cuando él recibió su diagnóstico de VIH, que se sentía tan aterrado de no poder compartirlo con alguien”.
Parte de esa experiencia, dijo, la llevó a contar la historia luminosa de resistencia que se vive en CHECCOS desde su documental.
Desde su experiencia, Michelle Rivera, artista y mujer trans, acusó que si bien ha habido más aceptación de personajes transexuales ahora hay otro reto.
“Todavía en la presentación televisiva y cinematográfica parece que tenemos que ser la chistosa y la graciosa, y tenemos que hacer todo para que se rían de nosotras y no con nosotras”, añadió.
El artista transformista Luis Ávila, que se ha catapultado a la fama con su personaje de drag Aviesc Who?, mencionó que actualmente ser travesti ya es algo respetado y glorificado, y que incluso hay infancias que ya hacen drag y sus padres lo apoyan.
Sin embargo, su lucha, compartió, es la de orientar y apoyar a personas que como él han sido diagnosticadas con VIH, que tienen la posibilidad de lograr ser indetectables e intransmisibles.
Coincidieron en que la posibilidad de contar historias de superación y más luminosas de las distintas diversidades dependen de directores, productores y actores.