El país de los antihéroes

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En los últimos días se ha corrido la voz sobre la presencia de reconocidos directores en el 24 Festival Internacional de Cine de Guadalajara. En los medios de comunicación, cafés, y aulas de estudiantes del séptimo arte, no han dejado de escucharse nombres como los de Emir Kusturica y Víctor Gaviria, quienes como ya se sabe fueron programados con cierta anticipación, por lo que son dos de los platos fuertes. El primero recibió ayer el Premio Guadalajara Internacional, ofreció un concierto en el Auditorio Telmex y presentó su más reciente producción Maradona por Kusturica (2008), documental sobre el futbolista argentino; mientras que el segundo viene como representante del país invitado: Colombia, a quien se le rendirá un homenaje por ser uno de los directores de mayor trayectoria en su país.
Sin embargo, son pocos los que saben de la presencia del director estadounidense de cine independiente Todd Solondz en el festival, ya que su asistencia fue anunciada apenas unos días antes de la inauguración. Solondz no viene a presentar su más reciente película, no es parte de un homenaje y posiblemente tampoco camine por la alfombra roja. Al parecer el director de Happiness (1998) sólo es parte del programa de conferencias para los estudiantes que participan en el primer Talent Campus, lo que es una lástima para quienes no son parte del mismo y un plus para quienes sí lo son.

Los perdedores están de moda
Desde hace algunos años los antihéroes en el cine contemporáneo están de moda. Cada vez es más común encontrarse a un loser como el protagonista de una historia. Directores como Jim Jarmusch, Aki Kaurismí¤ki y los hermanos Joel y Ethan Coen, son algunos de los que se sienten atraídos por este tipo de personajes despistados, con mala suerte, abandonados, fracasados y casi siempre desempleados o con poco dinero en el bolsillo. Éste es también el caso del director estadounidense Todd Solondz, que al igual que sus colegas, siente debilidad por las historias de perdedores, como un reflejo de la sociedad a la que pertenecen.
Antihéroes, losers, marginales y no deseados, son los personajes que caracterizan el cine de Todd Solondz. Películas como Welcome to the Dollhouse (Bienvenidos a la casa de muñecas, 1995), ganadora del Gran Premio del Jurado en Sundance; Happiness, Premio de la crítica en Cannes y Mejor película en el Festival de Toronto, Storyteller (2001) y Palindromes (2004), son algunos ejemplos de estos niños, mujeres y hombres solitarios, angustiados, deprimidos. El joven rechazado por su vecina y amado por la mujer que hace la limpieza, interpretado por Philip Seymour Hoffman en Happiness; Dawn, la niña que no encaja en la escuela, en su familia ni en su vecindario, en Bienvenidos a la casa de muñecas; Aviva, la otra niña que no quiere ser una loser y hace lo imposible para ser distinta a su prima Dawn, pero que es justamente ese camino el que la lleva a convertirse en una perdedora mayor que la primera en Palindromes.

Todd y la casita de muñecas
Todd Solondz nació en 1960 en Newark, New Jersey. Estudió cine en la New York University y durante sus años de escuela realizó su primer cortometraje titulado Feelings (1984), trabajo en el que además de dirigir, también actúa. Feelings es la historia de un joven deprimido que decide cantar sus sentimientos de amor a la orilla del mar. Este corto fue presentado el pasado sábado en el Cineforo dentro del marco del festival, en la sección paralela Cinema 16. Quienes vieron este trabajo pueden constatar que las temáticas de Solondz no han cambiado mucho y que la presencia de antihéroes en sus historias ya se comenzaban a perfilar desde entonces. Su primer largometraje Fear & Anxiety and Depression (1989), una comedia independiente con una mirada ácida sobre las relaciones de pareja contemporáneas, no hizo mucho ruido, fue hasta su segundo largometraje Welcome to the Dollhouse, que llamó la atención de la crítica internacional. Una reflexión sobre el lado oscuro de la adolescencia por la que obtuvo, aparte del reconocimiento de la crítica y del público, el Gran Premio del Jurado en el Festival de Sundance del año 1996. Comedia negra de la vida de una niña de 11 años que inspiró a más de uno a cambiar de rumbo. Karen O. vocalista de los Yeah Yeah Yeah’s, confesó en una entrevista que la película fue punto clave para decidirse a ser cantante, dejar atrás la vida que llevaba y probar suerte en Nueva York. Es un hecho que nadie quiere parecerse al personaje de Dawn, ni siquiera su prima Aviva, a quien en Palindromes la vemos decidida a realizar cualquier cosa para ser distinta a Dawn.

Felicidad II parte
El próximo proyecto de Solondz lleva por nombre Forgiveness, se trata de una especie de secuela de Happiness, pero con otros actores como Shirley Henderson, Michael Kenneth Williams, Renée Taylor, Charlotte Rampling, Paul Reubens, Allison Janney y Paris Hilton, entre otros. La historia transcurre en San Juan, Puerto Rico, y posiblemente se estrene en el próximo Festival de Cannes. Al igual que sus filmes anteriores, Forgiveness muestra historias que resaltan la falsedad y doble moral de la sociedad estadounidense, inmersa en un universo triste y desolador, pero con esa acidez que sólo Todd Solondz sabe poner a las situaciones más grises y existenciales de los personajes.

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