La egresada de la licenciatura en Psicología del CUCS, Elizabeth González, quien además cuenta con dos maestrías y un doctorado por la Universidad de Chihuahua, será la primera mujer juez internacional mexicana que asistirá a los Juegos Olímpicos en la disciplina del judo.
Apasionada de este deporte, en el cual se desempeñó como atleta y entrenadora de la selección de la Universidad de Guadalajara en la Universiada Nacional, formará parte de los 16 árbitros seleccionados del mundo y se ubica entre los 3 jueces elegidos de América Latina.
¿Cómo inicias en el judo? Fue fortuito, porque el primer entrenador que tuve buscó gente más o menos de mi peso, en la secundaria hizo una invitación y fui a prueba unos tres días y después de 15 días me quedé. El primer año que competí me fue muy mal y decidí quedarme porque no me gusta perder, y me quedé para buscar ganar lo que ahora son los Juegos Nacionales, y se dio. Yo competí muy poco, hasta mis 23 años en universitarios y hasta los 19 años en nacionales abiertos. Empecé a arbitrar a los 18 años y me gustó mucho, este año cumplo 18 como árbitro.
¿Qué ha sido lo más complicado de este camino en el arbitraje? El país es muy tradicionalista, hay muy buenos árbitros en México, soy la quinta en representar a México y la primera mujer. A mí nunca me ha gustado pensar en si eres hombre o mujer, pero sí creo que es más complicado abrirte paso como mujer, ahora está un poco más abierto, pero creo que la Federación internacional de Judo antes de ver una cuestión de género ve que seas un buen árbitro y para mí eso es importante, porque le da valor a tu trabajo.
¿Qué significa estar en los Juegos Olímpicos? No he tenido mucho tiempo de procesarlo, pero obviamente creo que es un logro importante, yo no sabía qué tan buena árbitro era hasta hace unos pocos años; nosotros hacemos exámenes a nivel continental, internacional y cuando me empiezan a invitar un poco más a los eventos, fue raro porque nunca lo pensé, siempre tenemos el sueño de ir a Juegos Olímpicos, pero para mí el proceso se fue dando, no se forzó, no fue como «quiero hacer esto», creo que porque soy muy responsable, me gusta trabajar duro.
¿Qué te han dejado estos años en esta disciplina? El judo me cambió mucho la vida para bien, tuve algunas situaciones complicadas y eso me salvó la vida de muchas maneras, el 80 por ciento de lo que soy se lo debo a esta disciplina, me abrió muchas puertas para estudiar, para trabajar, me está abriendo las puertas para conocer el mundo.
¿Qué mensaje das a las nuevas generaciones? Yo creo que es importante que sepan que todo se puede hacer, que no importa si eres mujer o si eres joven, yo esperé un poco más de tiempo para hacer mis exámenes porque me veían joven, no por la cuestión de calidad. Yo creo que para las nuevas generaciones todo se puede hacer si trabajas en las cosas y te enfocas en tus objetivos.
¿Cuáles son las próximas metas? Yo empecé el ciclo en el 2021 y lo empecé pensando en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028, y se fueron dando las cosas, ahora espero continuar y tener la oportunidad de ir a otros juegos.
El judo me cambió mucho la vida para bien, tuve algunas situaciones complicadas y eso me salvó la vida de muchas maneras, el 80 por ciento de lo que soy se lo debo esta disciplina, me abrió muchas puertas para estudiar, para trabajar, me está abriendo las puertas para conocer el mundo.
