Un primer álbum siempre es una moneda al aire. Las consecuencias que logre alcanzar un disco debut se encuentran supeditadas a diversos factores. El más determinante en la actualidad es la promoción efectiva y dinámica a través de internet. En este escenario, y más allá del reconocimiento inmediato, los músicos deben estar comprometidos con su propuesta y brindar valor y solidez a su carta de presentación.
Después de enfrentar ese primer paso, agrupaciones como The Strokes y Arcade Fire representan una muestra de equilibrio e inteligencia. En esta sintonía, la primera producción de la cantante y compositora Erika M. Andersen o sencillamente EMA, reúne la suficiente calidad para situarse entre los proyectos que apuntan hacia una carrera prometedora.
Después de formar parte de los grupos Amps of Christ y Gowns, EMA edita Past life martyred saints, una grabación compuesta por canciones que entrelazan la delicadeza de lo acústico y la fortaleza de un sonido trepidante.
Con acercamientos a la obra de Tori Amos y Siouxsie Sioux, Past life martyred saints concentra sus momentos más significativos en los temas “The grey ship”, “California”, “Milkman”, “Butterfly Knife” y “Coda”. Una producción que representa un buen comienzo, y que al mismo tiempo enfrenta desafíos para esta joven cantante.
