Fue acreedor a mención honorífica en el XXXI Premio nacional en ciencias y tecnología de alimentos 2007, dentro de la categoría profesional en tecnología de alimentos, por el novedoso diseño y operación de un equipo para el tostado continuo del café.
Enrique Arriola Guevara desarrolla investigación en el Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías (CUCEI). Sus trabajos dieron como resultado una novedosa tostadora de café.
El proyecto experimental lo realizó dentro de las instalaciones del Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco, A. C. (CIATEJ), con el apoyo del doctor Jorge A. García Fajardo.
“La tecnología es única, propia, novedosa, más versátil, higiénica y –presumiblemente– más económica que la de los tostadores tradicionales para obtener un tostado uniforme y continuo del café, lo que mejora la calidad del producto”.
Enrique Arriola Guevara encabezó el proyecto que dio como resultado esta nueva tecnología. El equipo, además del doctor García Fajardo, se compone de Tania García Herrera y Guadalupe María Guatemala Morales.
¿En qué consiste su invento?
Es un proceso y equipo diferente a los típicos tostadores de café, que son cilindros rotatorios. Nuestra técnica se basa en techos fuente. Los granos de café forman una fuente en contacto con aire caliente y van descendiendo en una columna, hasta salir perfectamente tostados de manera uniforme. El equipo constantemente se alimenta de grano verde por la parte superior y por la inferior obtenemos grano tostado.
¿Qué tuvieron que hacer para consolidar su invento?
Desde el punto de vista científico hicimos modelos matemáticos para definir el proceso. Caracterizamos el grano de café y el análisis del sistema para otras aplicaciones.
¿Qué ventajas tiene el equipo, en comparación con los existentes en el mercado?
Desde el punto de vista tecnológico es más versátil, higiénico y económico, ya que el tiempo de calentamiento es menor.
Las máquinas tradicionales de cilindro requieren de altas temperaturas y tiempos prolongados para tostar los granos de café. La consecuencia es que invariablemente producen un tostado oscuro, al quemar el grano y al formar depósitos de aceite y carbón en las paredes del cilindro. Resultan difíciles de limpiar después del proceso, lo que da como resultado un café con sabor amargo, desagradable y a humo.
Nuestro invento permite tostar el café, dándole un valor agregado. Por ejemplo, pueden mezclarse diferentes tipos de grano, así como olores y sabores al café.
Los productores cafetaleros podrían salir beneficiados. Al país ingresan por exportación de café verde alrededor de 500 millones de dólares anuales. Después del petróleo es la más importante materia prima de exportación.
El 80 por ciento del café es vendido en el extranjero, pero los productores venden su mercancía sin procesar, por el rezago tecnológico. Los impactos económicos que esperamos, son aumento de las divisas por exportación de café tostado, creación de nuevos empleos y reducción de costos de producción.
¿Con cuántos productores de café han platicado?
Estamos en el proceso de darlo a conocer. Hicimos visitas a los del estado de Jalisco. Tuvimos una reunión con ellos. También con el presidente del Consejo Estatal de Productores de Café, Balvino Ramírez Flores, en Talpa. Y fuimos a Chiapas.
Primera persona
Enrique Arriola Guevara es maestro en ingeniería química por la Oregon State University, EE. UU. (1982); doctor en ingeniería química por la misma casa de estudios (1997). En el CUCEI es profesor de posgrado. Sus proyectos de investigación, enfocados al área industrial, incluyen la aplicación y desarrollo de los lechos fuente y de la fluidización en general.