Especialistas proponen resignificar las ciudades a partir de la literacidad

CUAAD realiza XI Semana Académica de Letras para Volar 2021 “Urbaliteracidad”, del 19 al 23 de abril

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Foto: Gustavo Alfonzo

Las ciudades están llenas de símbolos que se pueden leer; y aunque se hayan escrito o impuesto de forma intencional o quizá accidental, éstos describen una identidad y aspiraciones colectivas, pero también violencias y olvido.

Con la pandemia, el espacio público y sus significados comenzaron a cambiar: la forma de moverse, entretenerse, ocuparlos, habitarlos. Por eso es urgente que cada vez más personas sepan leer y comprender la ciudad.

El COVID-19 cambia las reglas del entorno y ahí nos ayudará mucho la literacidad porque entenderemos a la sociedad y espacio en que vivimos; tendremos que equilibrar lo público y lo privado”, compartió el director de la Unidad de Conocimiento e Innovación de ONU-Hábitat, con sede en Nairobi, Kenia, Eduardo López Moreno.

Esto lo dio a conocer en la charla magistral “Literacidad y mejora urbana”, en el inicio de la XI Semana Académica de Letras para Volar, que se realiza del 19 al 23 de abril por parte del Instituto Transdisciplinar en Literacidad (Itrali), del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD).

El especialista indicó que los cambios en las dinámicas urbanas que hoy se viven se equiparan a lo vivido en el siglo XVI, cuando la humanidad occidental descubrió nuevas tierras y crearon mapas que reconfiguraron lo que se conocía.

“Hoy estamos reconstruyendo los mapas del siglo XXI, aprendiendo a vivir con pandemias. Esos nuevos mapas deben ser sobre nuevas pedagogías, desde la vecindad de la inmediación, la otredad y el contacto”, dijo López Moreno.

Algunas vulnerabilidades que pensábamos confinadas, en espacios donde se acumulaban las desventajas, hoy las encontramos en diferentes partes», recalcó el también arquitecto egresado del CUAAD. 

«La geografía del riesgo está cambiando, debemos repensar la geografía, la noción de proximidad, la distancia, el tiempo, el espacio y la conectividad”,

Cómo resignificar la ciudad

Para López Moreno la ciudad se parece a un palimpsesto, un manuscrito en el que se ha borrado, mediante raspado, el texto original para volver a escribir un nuevo texto. Es decir, se han escrito y borrado tanto la configuración de los asentamientos donde se habita, que en el proceso se han perdido significados que hoy son urgentes.

Un aspecto a modificar es la movilidad. Para el especialista viajar en bicicleta ayudaría a redescubrir unas lecturas de la ciudad a las que se estaban habituados.

“También al tomar un auto lo que debemos hacer es concentrarnos en el camino y no en el destino; al hacer esto reconstruimos la noción del espacio y la trayectoria: recobramos espacios olvidados, la anestesia de los lugares físicos se nos vuelve a activar otra vez y recomponemos la memoria del lugar”, compartió.

Por eso, caminar las ciudades también es reconstruir la empatía, la solidaridad, la identidad y el sentido del espacio. “Al hacerlo, haremos un cambio: recuperaremos una ciudad que existió en un palimpsesto, la ciudad ecológica que nos acerca a la naturaleza y que nos hace sentir el cambio social”.

De igual forma propone repensar el silencio y el olvido, pues los elementos sonoros también son detonantes identitarios. “En una evaluación que hicimos en los alrededores de París, donde la gente no quería irse a vivir ahí, vimos que la razón principal es que no había ruido», externó.

«El ruido es parte fundamental en la lectura de la ciudad; entonces, es una forma de literacidad diferente”.

“Nuestro cuerpo y mente tiene que revalorizar el entorno y ayudarnos a construir una nueva identidad. El espacio en esta noción de una lectura diferente nos ayudará a reconstruir una nueva narrativa de lo que somos y aspiramos, y quizá hacer una nueva cultura”, recalcó.

Comienzan actividades virtuales de Letras para Volar

Toda persona interesada podrá ser partícipe de las charlas de la XI Semana Académica de Letras para Volar, a través de facebook.com/itrali.udeg.

Durante cinco días, especialistas abordarán el concepto de urbaliteracidad” desde el diseño del espacio público, indigenismo, la inclusión, literatura y poesía; literacidad, comunicación, sustentabilidad, políticas públicas y gestión cultural, explicó la directora del Itrali y Letras para Volar, Patricia Rosas Chávez.

Entre el urbanismo y la literacidad queremos aprender a leer los espacios implícitos de la ciudad. El espacio público está lleno de símbolos y para interpretarlos necesitamos muchas miradas que la riqueza de la Universidad de Guadalajara (UdeG) nos aportará”, detalló.

El director del Sistema Universitario de Radio, Televisión y Cinematografía, Gabriel Torres Espinoza, explicó que esta semana académica, que se realiza de forma virtual, convoca a más de 40 expertos en 15 charlas virtuales.

Indicó que la urbaliciteracidad es un concepto creado por académico de la UdeG, que se vincula con el de alfabetismo funcional (tener las capacidades suficientes de lectura y escritura para desarrollarse en el orden verbal propias de una cultura) y el derecho a la ciudad (habitar, ocupar, producir, transformar y disfrutar de los asentamientos urbanos de forma justa, inclusiva, segura, sostenible y democrática).

El Rector del CUAAD, Francisco Javier González Madariaga, mencionó que las actividades de la semana académica van acorde con el Seminario de Urbaliteracidad que el plantel imparte a estudiantes de Arquitectura y de Urbanística y Medio Ambiente, pero también con el nombramiento de Guadalajara como Capital Mundial del Libro en 2022.

El Coordinador General Académico e Innovación de la UdeG, Carlos Iván Moreno Arellano, externó que leer la ciudad es la única manera de participar en ella de manera activa y de cambiarla.

“Las áreas urbanas van a absorber todo el crecimiento del futuro de la población mundial. Se estima que en 2050, 70 por ciento de la población viva en ciudades; es decir, poco menos de 7 mil millones de personas, y que muchos habitarán en asentamientos irregulares, donde no están todos los servicios para el desarrollo equitativo e incluyente”, declaró.

Reconoció que desde el CUAAD se tenga la mirada en la urbaliteracidad, que se suma a los esfuerzos de la UdeG en lograr una maestría en Ciencias de la Ciudad, con lo que será la primera universidad en Latinoamérica en tenerla.

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