La aceptación, el acompañamiento y la contención del núcleo familiar son fundamentales para que las niñas, niños, jóvenes y adolescentes construyan su identidad de género sin conflictos emocionales que puedan minar su autoestima, afirmó Esmeralda Correa Cortés, académica del Departamento de Políticas Públicas, del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas.
“Por los estudios que he realizado de la disidencia sexual, creo que lo que más daño le hace a una persona que está pasando por un proceso de este tipo es precisamente la falta de valor, reconocimiento, de aceptación y acompañamiento de su familia, ya de por sí a veces la pasan mal en la calle, entonces el no tener ese acompañamiento a ellos les retrasan mucho más su proceso de identidad, pero también de aceptación, de amor propio y de autoestima”, señaló la especialista.
La identidad de género de una persona puede ser independiente del sexo con el que nació y su orientación sexual. Se entiende como el concepto de uno mismo en cuanto ser sexual y de los sentimientos que esto conlleva; se relaciona con cómo vive y siente una persona su cuerpo desde la experiencia personal y cómo lo lleva al ámbito público.
La académica, quien ha realizado estudios al respecto, consideró que, en muchas ocasiones, son los dos padres o alguno de ellos quienes retrasan el proceso de identidad de las chicas y chicos y que puede darse desde la infancia hasta la adultez.
“Es fundamental que los papás empiecen a trabajar en esta parte de la aceptación de sus hijos, sí son ellos los que de repente la retrasan, por miedo y también por un montón de ignorancias respecto de qué es, entonces yo creo que en la medida en que ellos se informen van a tener menos miedo y van a decir está bien, hijo o hija, te voy a dar ese acompañamiento”, expresó.
Consideró que sea cual sea la identidad de género de sus hijas e hijos, es importante que los padres lean acerca del tema desde diferentes fuentes de información para poder orientar y comprender mejor este tipo de procesos.
“Cuando mamá, papá y hermanos lo aceptan ellos salen a la calle con una seguridad impresionante que no se verá afectada, es fundamental el núcleo más íntimo de un chico o una chica para posicionarse con esta identidad en la sociedad, le es más fácil abrirse paso, y hace que otros lo acepten, la aceptación en el núcleo familiar primero le desarrolla amor y autoestima y cuando una persona se siente aceptada, es más fácil enfrentar los desafíos de la calle”, puntualizó.
Añadió que las nuevas generaciones están más abiertas a la información en este tema y a la aceptación de sí mismos, su sexualidad y su identidad de género, por lo que es más fácil que vivan sus procesos y se alleguen de personas que les apoyan y aceptan.