Cuando algún joven externa su intención de estudiar la licenciatura en Filosofía o en Letras Hispánicas, sus interlocutores les responden con frases estigmatizantes: “no vas a encontrar empleo” o “te vas a morir de hambre”. Eso es falso, porque 95 por ciento de los egresados de estas carreras, que se imparten en la Universidad de Guadalajara (UdeG), se insertan en el mercado laboral.
Estas licenciaturas integran un semillero del pensamiento crítico y reflexivo en el Occidente del país.
El jefe del Departamento de Filosofía, del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), José Alejandro Fuerte, recordó que esta carrera se fundó en 1957 con el objetivo de celebrar el centenario del Año de la Reforma.
Ambas carreras, en un inicio, eran una sola, pero en 1981 las separaron y luego, con la reforma de la Red Universitaria hace 25 años, quedaron ubicadas en dos departamentos distintos.
“Como antecedente tenemos a la Escuela de Artes y Letras, que dirigía el licenciado José Guadalupe Zuno, y cuyo Secretario era el maestro Arturo Rivas Sáinz. La Facultad de Filosofía y Letras tuvo como primer director al maestro José María Díaz de León”, recordó.
La carrera de Filosofía proporciona habilidades de análisis, síntesis y razonamiento que se pueden aplicar en todo ámbito, por lo cual, un filósofo bien preparado no tiene complicaciones para encontrar empleo, agregó.
“Muchos dicen que la filosofía no sirve para nada. Los amigos les dicen que se van a morir de hambre. Pues no he conocido a nadie que se haya muerto así. Ellos trabajan, no sólo en la docencia, sino también en la gestión, en la administración pública o en empresas, gracias a la visión holística con la que egresan”, subrayó Fuerte.
Además, poco más de 50 por ciento de los egresados tienden a continuar estudios en otras entidades, o incluso en otros países. En el mismo CUCSH se cuenta con la maestría en Estudios Filosóficos, que tiene 24 estudiantes y la maestría en Bioética, con 12 alumnos, ambas inscritas en el Padrón Nacional de Posgrados de Calidad del Conacyt.
Actualmente, la licenciatura en Filosofía cuenta con acreditación vigente por parte de los organismos evaluadores y tiene en su nómina a 417 estudiantes. La planta docente está integrada por 67 profesores, y editan tres revistas de difusión de la filosofía, además de los programas de radio “Pórtico cínicos” y “Café filosófico”.
Fuerte hizo un llamado al Sistema de Educación Media Superior (SEMS) para que vuelvan materias como Filosofía, Ética y Lógica a los planes de estudio del bachillerato, pues con su ausencia los jóvenes pierden ese valioso bagaje, tan necesario en una época en la que reina la violencia y el odio.
Letras Hispánicas llegan hasta Hollywood
La licenciatura en Letras también tuvo sus inicios en 1957, a instancias del entonces Gobernador Agustín Yáñez, quien como escritor no pudo estudiar Letras, sino Derecho, y tenía la inquietud de que existiera una escuela para los interesados en la literatura.
“En pláticas con el rector funda la Facultad de Filosofía y Letras en 1957. Se otorgaba el grado similar a los profesores de la Normal, con orientación en filosofía, letras o historia. Y en la reforma de 1973-974 de la UdeG, pasa a ser licenciatura. Había un tronco común que era filosofía, letras, historia, sociología y biblioteconomía”, explicó la jefa del Departamento de Letras del CUCSH, Luz Eugenia Aguilar González
“En 1981, con una nueva reforma, se separan, y había las licenciaturas en Filosofía, Letras, Historia y Sociología. Y así fue hasta la reforma de hace 25 años, que creó la Red Universitaria y se divide en dos departamentos, el de Filosofía y el de Letras”.
Letras Hispánicas se centra no sólo en la literatura, sino también en la lingúistica, y de ahí han egresado escritores como Raúl Bañuelos, Dante Medina y Ricardo Castillo, por su aporte de saberes y habilidades para desarrollar herramientas creativas. La carrera también ha nutrido de docentes a la educación básica y bachillerato, en materias como lengua y literatura.
Judith Guzmán, egresada de Letras Hispánicas, participó en el equipo creativo de la más reciente película de Spiderman de dibujos animados. Los egresados también se abren paso en el mundo editorial, han fundado editoriales de peso como Arlequín y Pollo Blanco, gracias a su perfil de visionarios y emprendedores.
Otros han triunfado como gestores culturales, en oficinas de mercadotecnia como productores de contenidos en páginas web y narradores de historias de videojuegos. Algunos más en las oficinas de prensa, editando comunicados o generando discursos como asesores políticos.
“Tuvimos una revisión curricular que, en octubre de 2018, fue aprobada por el Consejo General Universitario. En estos trabajos de modificación al plan de estudios, nos dimos cuenta de que había esas áreas de oportunidad para los estudiantes, y que los egresados se estaban colocando de manera más rápida en el mercado laboral. Te puedo decir que 95 por ciento de nuestros estudiantes tiene trabajo cuando egresa”, dijo Aguilar González.
Esta carrera otorga competencias y habilidades para estructurar y analizar discursos, ser creativo, tener amplia cultura general que permita diseccionar la realidad y trabajar en diferentes campos de producción intelectual, de forma interdisciplinaria.
La licenciatura en Letras Hispánicas cuenta actualmente con 493 alumnos, 34 profesores de tiempo completo y una profesora huésped: la maestra Carmen Villoro; además de cinco profesores de asignatura y 17 profesores de otros departamentos que hacen su descarga horaria en esta carrera. Publican dos revistas de difusión: Sincronía y Argos, en colaboración con los departamentos de Filosofía y de Estudios Literarios.
