Menos de una tercera parte de quienes pertenecen a las academias de cine en 13 países son mujeres, afirmó María Fernanda Céspedes durante la presentación de un estudio en el que se identificó la participación de las mujeres en las 13 academias cinematográficas que conforman la Federación Iberoamericana de Academias de Artes y Ciencias Cinematográficas (FIACINE).
Durante el IV Encuentro FIACINE Mujeres «SOMOS DIVERSAS – Mujeres Diversas en el Audiovisual Iberoamericano», Céspedes, directora de dicha organización, detalló que de los más de siete mil 600 asociados, 30.4 por ciento son mujeres, es decir una de cada tres.
La Federación cuenta con más de mil 600 asociados que se dedican a las labores de dirección, de los cuales 19 por ciento son mujeres, mientras que en el área de producción, de 851 asociados 24 por ciento son mujeres.
Del universo de guionistas, 23 por ciento son mujeres y en el área de actuación o interpretación se cuenta con la cifra más alta de 45 por ciento, es decir, casi la mitad de los mil 900 asociados. En dirección de fotografía, las mujeres representan 6.9 por ciento del total, en tanto que dirección de arte son 36.9 por ciento.
Jaime Tenorio, secretario ejecutivo de la Conferencia de Autoridades Cinematográficas, que aglutina a todos los países de América Latina además de Portugal y España, afirmó que han impulsado políticas de inclusión de las mujeres en el ámbito del cine, pero también de grupos minoritarios como la comunidad LGBTQ+, las comunidades indígenas y los discapacitados, debido a que las historias han sido por muchas décadas narradas por hombres blancos, occidentales y heterosexuales.
Leticia Huijara, presidenta de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas, afirmó que aunque las mujeres son el grupo más grande de población en el mundo son tratadas como minoría en todos los ámbitos, incluído el cine, y es el paradigma que muchas organizaciones y academias están tratando de erradicar.
Señaló que esta organización ha trabajado para incluir a las comunidades indígenas que, a diferencia de otros países, no son una minoría sino un grupo con fuerza propia.