Sólo con el tiempo se juzgará el valor de las fotografías de José Hernández-Claire. La gran mayoría de las personas no conocen la obra de este fotógrafo tapatío, y él se encargó de que eso sucediera. Cuando le sugerían difundir sus fotos, respondía que no, porque se las iban a robar, afirmó Jeffry Fernández, quien preside la Sociedad Internet de México, durante la mesa de diálogo Tempus Instans. Rememorando a José Hernández-Claire, en el marco de su primer aniversario luctuoso, en el Museo de las Artes Universidad de Guadalajara (MUSA)
“Cuando iba a su casa, me sacaba de onda encontrar cientos y cientos de rollos de la época de la fotografía analógica sin revelar. Cuando le preguntaba qué había en esos rollos, me respondía: “¡sabe lo que hay!”, y si me metía a su computadora, me encontraba varios folders con gran cantidad de fotos, pero no sabía lo que tenía en su propia computadora”.
El trabajo de los que quieran revisar su obra va a ser titánica, de muchas horas, compartió.
Describió que José Hernández- Claire se caracterizó por su pasión por la fotografía. Era su razón de ser y su vida. Cuando salía de su casa sin alguna de sus cámaras se sentía muy mal, y no le gustaba tomar fotos con el celular.
“Yo le decía: “Vas a terminar tomando fotos con el celular, como todo el mundo”. Él me respondía: “Primero muerto que tomar una foto con el celular. ¡Nunca, nunca verás que yo tome una foto con el celular!”, y yo creo que, si hubieran vendido celulares sin cámara fotográfica, él se hubiera comprado uno”.
“Pocos momentos lo vi feliz, siempre era una persona que sufría mucho. Sus amigos le decían Pepe Penurias, en son de vacilada, porque se lamentaba de todo, pero en esa personalidad de tristeza y dolor, disfrutaba y desahogaba en la fotografía, que era su placer y gozo”.
“Definitivamente era un genio, y se comportaba como los genios. Tenía una personalidad complicada. Era sumamente humilde y sencillo, pero al mismo tiempo tenía un carácter intenso y fuerte, pero su personalidad, fuerza y humildad se plasmaba en sus imágenes, que cuando uno las ve narran una historia, son imágenes muy intensas”.
El fotógrafo Sergio Garibay, quien se ha desarrollo en la promoción y difusión de la fotografía a través de talleres especializados, dijo que conoció al fotógrafo homenajeado en los pasillos de la FIL. “Era la persona que tomaba fotos a diestra y siniestra a todo lo que se moviera. Se caracterizaba por su respeto a la profesión y a los demás fotógrafos. Para mí siempre fue don Pepe, un gran fotógrafo”.
La fotoperiodista Eva Becerra, quien forma parte del colectivo Mirada Tapatía y una vez al año es parte del equipo Foto Fil (Feria Internacional del Libro), contó que ella conoció a José Hernández-Claire cuando llegó al estudio de yoga donde ella trabajaba. En aquel entonces ella ya no hacía fotoperiodismo, estaba en una etapa de su vida cerrando un ciclo y empezando otro.
“Cuando llegó, lo reconocí, ¿Quién no lo iba a reconocer con ese porte y estilo único?, y lo traté como alumno, pero me moría de ganas de decirle: “soy tu fan”, y al terminar toda la guía para que él escogiera la clase más adecuada a sus necesidades, no me aguanté y le dije: “yo sé quién eres tú”, y desde la humildad que lo caracterizaba, contestó: “¿Cómo que sabes quién soy yo?”, me presenté, le dije que era fotoperiodista, y me comentó: “yo también sé quién eres tú”. Al final, eligió una clase mía, y me volví maestra de él, iniciamos una gran amistad por el yoga y cada FIL presumía estar en clases conmigo”.
“José Hernández-Claire fue un personaje que yo admiré todo el tiempo, que respeté. No puedo hablar de foto con nadie tal como lo hacía con José. Extraño tener esas platicas profundas sentados comiendo fruta. Era un maestro dedicado, un fotógrafo disciplinadísimo, un personaje muy sencillo y generoso”, externó el fotógrafo Ricardo Guzmán, quien estuvo a cargo de los proyectos relacionados a la gestión, producción, difusión y exhibición de las artes visuales de Cultura UDG y ha gestionado exhibiciones fuera de México para la Universidad de Guadalajara (UdeG).
La conductora de Radio UDG y fotógrafa Cecilia Fernández, quien fungió como moderadora, calificó a Hernández-Claire como una persona querida y cercana a la comunidad cultural de la ciudad, y como un gran creador.
José Hernández- Claire nació en Guadalajara en 1949 y falleció el 18 de septiembre de 2021. Fue Arquitecto por la Universidad de Guadalajara en 1976. En 1980 obtuvo una Maestría en Diseño Urbano por el Pratt Institute de Brooklyn, Nueva York. Estudió fotografía, desde 1978 a 1982 con Philip Perkis, Arthur Freed, Paul McDonough y en Rockport, Maine, con David Vestal y Don Mc Culin.
Conoció a Manuel Álvarez Bravo y André Kertész, a quien retrata en su apartamento de Manhattan. Ambos artistas influyen significativamente en el trabajo de Hernández-Claire.
En 2007 fue reconocido con el Galardón Honorífico “Enrique Díaz de León”, otorgado por la UdeG. En 2008 expuso en el Museo de Arte de Guangdong, en China y una decena de sus fotografías se incorporaron a la colección permanente de ese recinto.
Dentro de su trayectoria de más de cuatro décadas contó con más de 100 exposiciones individuales y colectivas, así como con numerosas publicaciones en libros, diarios y revistas nacionales e internacionales. Su obra se encuentra en importantes colecciones de Francia, Suiza, China, Alemania, Hungría, Canadá, Estados Unidos, Cuba, España y México.