Hay mucho que festejar en la licenciatura de Artes Escénicas para la Expresión Teatral del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD). Dos de sus alumnos, así como la obra de teatro en la que participan, resultaron ganadores durante el 25 Festival Internacional de Teatro Universitario (FITU) de la UNAM, que concluyó el pasado 18 de febrero en la Ciudad de México.
Es la primera vez que una obra hecha por estudiantes de la Universidad de Guadalajara resulta ganadora en el FITU en todas las ternas: mejor obra, mejor actriz y mejor actor.
Se trata de Las tremendas aventuras de la capitana Gazpacho (o de cómo los elefantes aprendieron a jugar a las canicas), obra escrita por Gerardo Mancebo del Castillo y dirigida por el profesor del CUAAD Eduardo Covarrubias Díaz.
Esta representación teatral participó en la categoría “C2”, una de las cinco que tiene el festival y que corresponde a montajes de escuelas profesionales de teatro que son dirigidas por profesores.
El premio a Mejor Actor fue para Eduardo Molina, estudiante de quinto semestre que interpreta a Catalino, el fiel escudero de la historia.
“No me lo esperaba, las otras obras con las que competimos tienen calidad. Esto me sorprendió y me siento agradecido, sobre todo motivado. Esto lleva una responsabilidad porque somos el primer montaje de la Universidad de Guadalajara que gana en veinticinco años del FITU, y que además es ganador de todas las menciones de la categoría”.
Comenta que “el concurso del FITU consistió en una etapa de selección de septiembre a octubre de 2017, cuando el jurado de la UNAM presenció la obra en el CUAAD. En noviembre definieron los finalistas, que son cuatro obras para categoría, nosotros participamos con Colisiones y Las tremendas aventuras…, es decir, competimos con nosotros mismos”.
Además, los universitarios se disputaron el reconocimiento junto con la obra El ensamble, del CEA de Televisa, y con Esta puta ópera de a peso, de CasAzul Artes Escénicas Argos; dos de las escuelas actorales más conocidas en México.
La distinción de Mejor Actriz fue para Blanca Teresita Álvarez Gutiérrez, que cursa el octavo semestre. Ella considera que el mayor reto fue interpretar a la protagonista de la historia, La Capitana.
“Es un personaje apasionado, es aventurera y se ríe de la vida. Ella cree firmemente en sus ideales. El reto más grande fue no hacerlo como yo, me considero muy parecida a ella, el personaje llegó a hacerme clic, por lo que tuve que descomponerme para crear un algo diferente. Lo que siento es una satisfacción muy grande tras muchos años de trabajo”, comenta Álvarez Gutiérrez.
La joven señala que la obra es una mezcla de Don Quijote y Alicia en el país de las maravillas, más un toque de simpleza. “Aquí se muestra cómo los seres humanos cuando tenemos intereses personales nos dejamos de escuchar, es padre ver cómo entre risas el público se da cuenta de esto”.
Según Molina, la pasión y empeño de quienes hacen la presentación fue lo que conquistó al jurado de la UNAM. “El colectivo Cardumen Teatro, que es el que lo lleva a cabo junto con el CUAAD, toma mucho las riendas de sus montajes. Nosotros mismos gestionamos esto con la ayuda de la Universidad de Guadalajara y eso se nota”.
Álvarez Gutiérrez elogia el trabajo de Eduardo Covarrubias, quien tiene una visión estética y cuya dirección y timing escénico permitió crear los efectos cómicos que dotan de encanto a la obra.
El pasado 9 de febrero la puesta en escena se presentó en el Foro Sor Juana Inés de la Cruz, en Ciudad Universitaria de la UNAM, función que se llenó de asistentes capitalinos, quienes le dieron un gran recibimiento al equipo universitario.
El premio a la mejor obra constó de un apoyo económico de veinte mil pesos y la integración de ésta al ciclo de teatro de representaciones ganadoras, que será a mediados de este año en Ciudad Universitaria.
Los jóvenes buscan generar más funciones de esta representación en Guadalajara, por lo pronto el pasado jueves 22 de febrero se presentaron en El Forito.
