La lucha que emprende Saraí Tapia Tello, egresada de la maestría en Gestión y Desarrollo Cultural del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD) , es que se reconozca el trabajo de las mujeres que, con sus manos, han creado obras que materializan la identidad artesanal de Jalisco.
Por ello, este año ha llevado su proyecto “Mujer Artesana / Artisan Woman” a cristalizar la Semana de la Mujer Artesana, que se realiza del 13 al 20 de agosto y que incluye una serie de actividades para difundir la vida y obra de creadoras de Tlaquepaque y Tonalá.
“Esto es parte del proyecto ejecutivo de la maestría. El objetivo es visibilizar su labor y el ser portadoras del patrimonio, así como evidenciar sus historias de vida; por ello, la investigación es parte principal para conocer sus necesidades específicas”, explicó la gestora.
Tras ser beneficiada con el Programa de Acciones Culturales Multilingües y Comunitarias (PACMYC) 2020-2021 de la Secretaría de Cultura de Jalisco (SCJ), Tapia Tello emprendió esta semana para difundir el legado de las artesanas, a través de varias actividades:
- Una expo venta artesanal, donde 30 artesanas de Tlaquepaque y Tonalá ofertarán sus obras en el Jardín Hidalgo del Centro de Tlaquepaque; esto del 13 al 15 de agosto.
- Charlas y conferencias magistrales, del 16 al 18 de agosto, sobre las mujeres creadoras del arte popular mexicano, que se transmitirán por el canal de Cultura Jalisco y fb/mujerartesana.artisanwoman
- La presentación de dos episodios de podcast sobre mujeres artesanas de barro canelo, creados por el programa Polifónica de Radio UdeG, en la página de Mujeres Artesanas, el 19 de agosto.
- Una ceremonia-homenaje a 25 artesanas; entre ellas, se reconocerá a quienes son consideradas como patrimonios vivos y quienes sus familias dieron renombre a la Villa Alfarera; el viernes 20 de agosto, en el Museo Pantaleón Panduro.
Algunas de las homenajeadas son Paz Cejas, de 100 años; Alejandra Rosas, de 92 años y María Martínez, de 85 años. Ellas dedicaron su vida a hacer los nacimientos con la técnica tradicional monera de Tlaquepaque.
“Algunas de las artesanas son primera generación, pero hay quienes van por la sexta”, explicó la gestora cultural.
Además, la Semana de la Mujer Artesana tendrá una segunda parte a mediados de septiembre, cuando se dará a conocer un documental sobre artesanas tonaltecas, un libro y una muestra en el Museo de Artes Populares.
Conversaciones alrededor de “las mujeres de arcilla”
Algunas de las charlas a realizarse serán: “El arte, la historia y la cultura para las mujeres herederas del arte popular”, con la participación de la periodista cultural Verónica López y el gestor Ricardo Duarte; el lunes 16 de agosto.
La conferencia magistral «Feminismo y arte popular», por parte de Eli Bartra, de la maestría en Estudios de la Mujer y del doctorado en Estudios Feministas de la Universidad Autónoma Metropolitana-Xochimilco; el martes 17 de agosto.
La conferencia magistral “Las mujeres como generadoras del cambio social”, con la fundadora y Directora del Museo de las Mujeres de Costa Rica, Claudia Mandel.
Preocupa la pérdida de conocimientos ancestrales
Algunos conocimientos artesanales están a punto de desaparecer. En Tlaquepaque, la única persona que conocía la técnica al temple es Alejandra Rosas, de 92 años, quien dejó de crear obras por motivos de salud.
“Este año, ella dejó de trabajar la técnica, que es una de las más antiguas y que utiliza clara de huevo, goma de mezquite y anilina, y que ya nadie más la usa; y con ella se pierde el linaje. Los abuelos de Alejandra fueron quienes dieron el renombre a la Villa Alfarera de Tlaquepaque, junto con Pantaleón Panduro”, contó.
Tapia Tello compartió que, además, se suma el problema de que muchas de las familias artesanas deciden no seguir el oficio, debido a veces porque no encuentran los canales de venta del producto. Para hacer frente a esto, lo que la gestora ha emprendido es la creación de grabaciones que tienen salida en cápsulas en redes sociales y documentales, para difundir la técnica.
De igual forma, ella se ha enterado de que gente de la Escuela de Conservación y Restauración de Occidente (ECRO) también se ha acercado a las artesanas para conocer las técnicas; sin embargo, Tapia Tello reconoce que eso no es suficiente y que además no se le apoya a las mismas artesanas.
“Ellas esperan difusión y apoyo, pero al final el beneficio económico sigue sin llegar”.