Ricardo Hernández no dudó cuando le preguntaron si quería formar parte de los voluntarios que atenderán a los pacientes de coronavirus en una de las áreas habilitadas para ese fin en el Hospital Civil de Guadalajara (HCG).
Malpasadas, desvelos y alejarse de su familia son algunos de los sacrificios que ha asumido este enfermero de vocación y profesión.
Hernández Gómez señala en entrevista que él y otro grupo de profesionales de la salud están dispuestos a asumir este reto por el bienestar de los jaliscienses.
“Nuestra vida ha dado un giro de 360 grados, para todos. Es un equipo joven, un equipo comprometido. Los que se han anotado en esta área de Covid-19 lo hicieron de manera voluntaria porque desean ayudar a las personas. No nos mandaron para acá, venimos porque amamos lo que hacemos, porque estamos comprometidos con la salud, porque los enfermeros también hicimos un juramento para defender la salud”.
¿Qué dijo tu familia cuando les notificaste que te anotarías como voluntario para atender el área de Covid-19?, pregunta el reportero.
«Desde que eres profesional ellos saben que nuestra vida es esto. Sabemos que es un riesgo. Nosotros como medida preventiva hemos decidido estar aislados de nuestras familias, las contactamos solamente con las tecnologías, videollamadas, vía whatsapp. Estamos aislados, no comemos con ellos, no usamos el mismo sanitario, toda nuestra ropa la tratamos de manera independiente, no la metemos a la misma lavadora».
¿Qué más medidas tomaron?
«Yo habilité una habitación para todos los meses, que no se cuánto durará esto, para estar aislado de mi familia, para no tener ningún tipo de contacto físico y contamos artículos de limpieza propios. Nuestro calzado lo dejamos en los patios, para no contaminar el tránsito, el flujo de las casas. Los extrañamos, pero esta es nuestra misión».
Las áreas de Covid
El HCG habilitó dos áreas para la atención de pacientes con Covid-19, una en el Antiguo Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde” y otra en el Centro de Investigación Clínica y Medicina Traslacional (CIMeT), ubicado en el Nuevo Hospital Civil de Guadalajara «Dr. Juan I. Menchaca».
Pedro Martinez Ayala, infectólogo adscrito a la unidad Fray Antonio Alcalde, quien trabaja en el área de Covid, explica que el equipo que brindará atención a los pacientes es de alrededor de 50 personas, y que todas han recibido la capacitación y el entrenamiento para actuar en esta situación.
“Todos me llenan de orgullo y me inspiran. Personalmente, he vuelto a hacer guardias, lo cual tenía mucho tiempo sin hacerlo. Ha sido un sacrificio lejos de la familia, no ver a mis papás y hermanos, pero confío en que juntos vamos a salir de esto, confío muchísimo en la sociedad tapatía y jalisciense en general. Yo creo que los héroes somos todos los ciudadanos, en la medida que atendamos las medidas de higiene, lavarnos las manos, no tocarnos la cara, acatar el aislamiento domiciliario. Esto hará la diferencia”, explica Martínez Ayala.
Los profesionales de esta área trabajan en tres turnos, de lunes a domingo, sin parar.
“No esperaba menos de mis colegas infectólogos, y sobre todo lo más motivante y que me inspira: del personal de enfermería, intendencia, administrativos en área de Covid-19. Todos estamos puestos y dispuestos. En este campo de batalla ves las líneas entrenadas y estamos listos”, añade.
Agresiones a enfermeras y enfermeros
En los últimos días se dieron casos de agresiones verbales y actos de discriminación contra enfermeras y enfermeros, tanto en unidades del transporte público y taxis, como en las calles de la Zona Metropolitana de Guadalajara, de acuerdo con un oficio firmado por la maestra Edith Mujica, presidenta de la Comisión Interinstitucional de Enfermería.
Esto ha llenado de pesar a quienes se sacrifican por la salud de los jaliscienses, sobre todo, porque las personas desconocen los protocolos y no saben que una enfermera o enfermero no sale a la calle con un uniforme con el que haya estado en el hospital.
“Tenemos protocolos para el retiro del equipo de protección personal. Usamos un traje quirúrgico desechable, botas para proteger nuestro calzado, por encima una bata, doble par de guantes, googles de protección ocular, cubrebocas y gorro para proteger el cabello. Todo eso se desecha, requiere como tal un manejo especial, se le brinda tratamiento específico y tenemos un vestidor en un área totalmente independiente donde se encuentran los hospitalizados, pero la gente desconoce todo eso. No somos un riesgo de infección”, aclara Ricardo Hernández.
Pero nada de eso amedrenta a estos héroes sin capa. Ni las jornadas extenuantes, ni los desvelos, ni mucho menos las agresiones de algunas personas, sobre todo porque cuentan con lo más importante: el apoyo incondicional de la mayoría de la sociedad jalisciense y de sus superiores y directivos.
“La dirección del Hospital Civil ha tenido el compromiso hacia nosotros de brindarnos todo lo necesario. Hemos recibido todo el material que se ha requerido, nuestros directivos están preocupados en que tengamos todo lo necesario para trabajar. Y lo que a mí más me llena es el trabajo de los compañeros y todo el equipo médico ha tenido rotundo compromiso hacia la atención del paciente y me llena de alegría que no soy solamente yo el único comprometido, sino que habemos muchos enfermeros comprometidos con la profesión y salud del paciente”, concluyó Ricardo Hernández.
