“Un personaje fundamental, por demás vital en la estructura espiritual del pueblo mexicano”, es como describió a la Malinche Efraín Franco Frías, tras el estreno del cortometraje Malinche, una identidad rota, en el Canal de YouTube del Lucille Lortel Theatre.
En conferencia transmitida por el Facebook del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD), el investigador, creador de la obra de teatro homónima de la cual la película es una adaptación, y quien ha dedicado años al estudio de “La Malinche”, dijo que es el “personaje determinante en la conquista, evangelización y construcción del Nuevo Mundo, de la Nueva España”.
Luego de investigar sobre la historia de esta mujer indígena, y de haber obtenido una beca a través de la Iniciativa Cultural para Inmigrantes del Gobierno de Nueva York, se adentró en la historia del “personaje histórico, personaje dramático” para retratar a una nueva Malinche, presente aún en el imaginario mexicano.
Ahora este cortometraje, producido por Maura Le Viness, recrea la vida de quien fuera esposa y traductora del conquistador de México, Hernán Cortés.
Franco Frías comentó que Malintzin representa a “la madre de la mexicanidad”, mujer que “fue ofendida, humillada, ajada, violada, chingada, tutificada, cosificada”, como es posible ver en diversas escenas del cortometraje. Por ejemplo, aquella en que la Malinche atraviesa el puente de Manhattan, y dice al viento cómo se han dicho mentiras sobre su historia, y habla de todo lo que perdió: “Perdí la capacidad de sentir, de creer, de soñar, de amar”.
Desde que era niño, el también escritor se hacía preguntas como “¿quiénes somos?, ¿de dónde venimos?, ¿cuál es nuestra verdadera madre, nuestra madre simbólica, nuestra madre nutricia?”, interrogantes que lo impulsaron a ahondar en la vida de Malintzin.
Gracias a la literatura, a la obra de diversos escritores y cronistas, la encontró escondida entre lo que plasmaron autores como Francisco Gómez de Gómara, Carlos Fuentes, Alejo Carpentier y, por supuesto, Bernal Díaz del Castillo.
Desde una perspectiva que evoca al nacionalismo, Franco Frías aseveró que “no podríamos explicar nuestra existencia, nuestra identidad actual, sin profundizar en este personaje que es una columna vertebral del México de ayer y del México de hoy”, pues “en su lengua estaba el futuro de dos imperios”, el que representaba Moctezuma y el de Hernán Cortés, “momento culminante” que significó las alianzas e interacciones entre diferentes partes del mundo en un mismo lugar.
TEXTO: Eladio Efraín Quintero Hernández (Periodismo / CUCiénega)