Uno pensaría que hoy en día con las nuevas tecnologías, las bibliotecas tenderían a estar más solas, sobre todo a falta de jóvenes. Pero no es el caso de la Biblioteca Iberoamericana Octavio Paz, un recinto histórico en el corazón del Centro de Guadalajara, una construcción del siglo XVI que tuvo diferentes usos a lo largo de la historia y que, desde 1991, se convirtió en una de las bibliotecas más emblemáticas de la ciudad.
La poeta y escritora Carmen Villoro, directora de esta biblioteca, nos platica que la Iberoamericana sigue siendo una biblioteca a la que asisten los amantes de los libros, un espacio que abraza al lector, donde jóvenes preparatorianos buscan el libro impreso, donde los académicos encuentran libros de investigación, y que los adultos mayores han tomado como si fuera la sala de su casa.
Vemos que algunas bibliotecas se encuentran solas, no sé si será por el boom tecnológico, pero otras como la Iberoamericana siempre tienen visitantes…
Es que las bibliotecas, como las personas, tienen personalidad, y esta es una biblioteca que por su misma conformación, por el sitio en el que está, por el edificio en el que está alojada, por todo el contexto, invita a la lectura de libros tradicionales, de libros en papel, aunque también no dejamos de estar al día y tenemos nuestras computadoras, nuestra área de consulta en internet, porque claro que estamos en una época en que tenemos que tener las redes sociales al día. Pero sigue siendo esta una biblioteca a la que asisten los amantes de los libros y los amantes de la lectura. Yo diría que la característica de esa biblioteca es que es muy hospitalaria, que acoge, que abraza al lector.
¿Qué población es la que vista esta biblioteca?
Es muy variada, tenemos muchos estudiantes, no sólo de la UdeG, sino de muchos estudiantes de las escuelas de alrededor que vienen a realizar sus tareas, a consultar diccionarios, enciclopedias, pero además tenemos muchos usuarios de la tercera edad, tu puedes verlos, y vienen a leer sobre todo periódicos, a meterse a las computadoras y lo han tomado como si fuera la sala de su casa, hay muchos usuarios del barrio, eso me encanta porque es una biblioteca que le da servicio a la comunidad universitaria, pero también al centro de la ciudad, en ese sentido, es un corazón palpitante dentro del centro de la ciudad. Tenemos además acervos muy especializados, uno que se encargó de nutrir el maestro Fernando del Paso durante los años en que estuvo como director, estamos hablando de 90 mil libros y un acervo especializado en literatura iberoamericana y arte muy envidiable.
En el caso de los jóvenes, hablas de que vienen a realizar sus tareas, pero ¿tienen el seguimiento de los títulos que son más consultados por estudiantes?
Tenemos mucha consulta de historia y geografía de México, también temas como la segunda Guerra Mundial, de historia universal. En cuanto a literatura, tenemos mucha consulta latinoamericana: Gabriel García Márquez, con Cien años de soledad; los cuentos de Julio Cortázar y su novela Rayuela.
¿Los jóvenes buscan esos títulos?
Sí claro, buscan a Juan Rulfo, a Vargas Llosa, a Borges, Octavio Paz, son los títulos más buscados por los jóvenes preparatorianos. Y tiene que ver con que son autores que están dentro de los programas escolares de las prepas. Aquí vienen a consultarlos de manera impresa. Y es muy interesante este punto, y me gusta mucho, porque los jóvenes siguen buscando el libro impreso, porque el libro no tiene sustituto, porque por practicidad sí lo buscan en la tableta, o internet, pero no hay como la experiencia de tocarlo, hojearlo, olerlo, incluso te podría decir, y lo veo, que los adultos mayores buscan más meterse al internet que los jóvenes.
¿Cuáles son las temáticas más consultadas por los académicos?
Sobre todo literatura iberoamericana, arte y arquitectura contemporánea. Al maestro Fernando del Paso le gustaba mucho el arte, y tenemos una colección de arte bellísima, libros que difícilmente puedes tener en tu casa, porque son caros, especializados. Hemos visto que la arquitectura es muy consultada. Vienen muchos académicos del CUAAD y del CUCSH, pues saben que aquí encontrarán acervo de literatura y ciencias sociales en general que les va a resolver muchas de sus dudas de investigación.
¿Tienen un estimado de las visitas diarias de los usuarios de la biblioteca?
Tenemos un estimado general de unos 450 usuarios diarios, lo cual es importante y va en ascenso, y yo creo que lo vamos a duplicar pronto con todas las actividades culturales que estamos programando e impulsando. La biblioteca siempre ha tenido algunos servicios culturales como el cuentacuentos para los niños, todos los sábados, y algunas lecturas, pero ahora ya lo estamos programando como algo más consistente para tener conferencias, encuentros, lecturas, vamos a empezar con talleres, para darle una vida en donde la biblioteca no sólo se entienda como un acervo de libros, sino un lugar donde pasan cosas y donde la cultura tiene diferentes manifestaciones.
¿Cuáles serían las acciones para impulsar esta biblioteca como un centro cultural?
Estamos queriendo consolidar los servicios que ya desde hace mucho tiempo se dan en esta biblioteca, que ya son tradicionales: equipo de braille, que ya está listo para volver a dar servicio. El área infantil con un acervo muy digno de literatura. El de internet y nuestro acervo al usuario. Tenemos mucho interés en que la biblioteca tenga un buen mantenimiento y seguridad. Hay mucha gente que viene a visitarla por el espacio, ya que ha tenido muchas vocaciones, y cuenta con los murales de Siqueiros y de Amado de la Cueva, que son emblemáticos. Por ello tenemos el servicio de las visitas guiadas. Y respondiendo a tu pregunta, junto con todos estos servicios que ya se dan, estamos queriendo ofrecer más conferencias, talleres, presentaciones de libros, conciertos, hasta proyecciones de películas. Se está en pláticas con varios arquitectos, para realizar un Aula Magna que se llamará Fernando del Paso. El proyecto es para realizarlo en marzo de este año. También estamos negociando con el municipio para que se vuelva a utilizar la plaza como se hacía hace muchos años. Queremos sacar la biblioteca a la plaza y brindar conciertos, clases de danzón, entre otros.
