Leyendo Mujeres, una comunidad para la lectura de autoras

Durante un coloquio de la Licencitaura en Gestión Cultural impartida por el CUGDL tuve la oportunidad de compartir la mesa con Noelia Mendizabal. Ahí fue que escuché hablar por primera vez de “Leyendo mujeres”, un espacio que busca dar a conocer autoras. Un proyecto que comienza cuando Noelia, leyendo un artículo en el que decían que las mujeres eran la nueva cara de la literatura Latinoamericana, se cuestionó: ¿cuántas autoras conozco? ¿Qué historias son las que se cuentan? 

Actualmente el equipo está conformado por Jenipher, Melissa, María Conchita y Noelia, entre otras que están dando difusión a la lectura de mujeres en este espacio que se gesta como un club de lectura, pero que gracias a la estabilidad que tienen en su estructura y a la flexibilidad para ampliar sus metas están evolucionando a una colectiva que les permita realizar más actividades. 

Leyendo mujeres nace en septiembre de 2019, por lo que estamos ante un proyecto que sobrevivió la pandemia y que se mantiene en pie. Es una constante en su historia el adaptarse a las circunstancias, pero no solo en la forma, sino también en el fondo, pues Melissa Ordoñez menciona que han buscado diversificar sus lecturas, poniéndo el foco en autoras contemporáneas como Banana Yoshimoto, Alma Delia Murillo o Camila Sosa Villada.  

En Leyendo Mujeres han tenido la participación de autoras como María Antonieta Mendívil, Daniela L. Guzman y Sofía Morín con quienes han podido para platicar de sus libros y “echar chal” con ellas. Esto les funciona bien pues es una práctica que les ayuda a quitar el misticismo que envuelve a las autoras y conectar con ellas a través de una platica en la que pueden sentirse más cercanas con sus lectoras, explicann Melissa y Conchita. 

Jenipher nos comparte que para ella es muy importante que el proyecto pueda crear una comunidad, porque solo así se puede llegar a otros espacios. Se trata de un trabajo horizontal en el que cada una de las encargadas del proyecto sabe qué tiene que hacer y cuál es su papel dentro de esta red, haciendo que cada una de las áreas en las que son expertas por su formación académica vayan uniendo cada una de las piezas de este rompecabezas. 

La comunidad que han logrado formar se percibe incluso en las interacciones que tienen durante la entrevista, pues existe una complicidad propia no solo de un equipo de trabajo, sino de un grupo de amigas que están haciendo algo que les apasiona. Donde las voces de todas se escuchan al unísono y dejando que cada una tenga un espacio para decir lo que piensan. 

Todo el año nuevas personas son bienvenidas a sumarse a este club gratuito de lectura en el que también se harán parte de una comunidad.