Los Ecos de Abdelá Taia en la FIL

El escritor marroquí participó en el programa Ecos de la FIL, cuyo objetivo es fomentar el hábito de la lectura entre los bachilleres a través de diálogos informales y amistosos con los autores

1233
Foto: José Díaz

Abdelá Taia aprendió a escuchar historias en su natal Salé, en Marruecos, allá donde los melodramas de la vida real eran más importantes que las novelas de la televisión y donde las consecuencias podían ser maravillosas o muy duras. Hoy esas historias forman parte de su obra literaria, entre ellas Mi Marruecos, Infieles, El que es digno de ser amado, publicaciones que pueden adquirirse en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara.

Él opina que las historias de otros, no solamente las suyas, deben de ser algún día contadas. «Estaba fascinado con lo que pasaba frente a mí, era como si enfrente de mí hubiera estrellas de cine. Ellas eran estrellas”.

Ante estudiantes de la Preparatoria de Tonalá Centro, el escritor marroquí, quien desde 1998 vive en París en un autoexilio, contó divertido algunos fragmentos de su vida, como cuando a cambio de helados era sirviente y protector de sus hermanas, “y no las protegía para nada”, o pensar si fantaseaban con el mismo chico.

Foto: José Díaz

Narró travesías de vida que plasmó en su película con temática gay El Ejército de Salvación, título de su novela homónima, pero también habló sobre la fuerza de las palabras.

“Cuando alguien entra en tu corazón y toca tu corazón, después de eso puede decir lo que quiera. Las palabras que salen de su boca no son palabras realmente de él o de ella, son las palabras de la sociedad, de la política. A veces los jóvenes hablan entre ellos con palabras que en realidad no son sus palabras. Utilizamos las palabras falsas o erróneas que nos limitan a conectarnos entre nosotros».

Foto: José Díaz

Taia, junto con Leonardo Padura, Mariela Dreyfus y Joumana Haddad, son parte de un grupo de escritores que participaron en el programa Ecos de la FIL, el cual tiene como objetivo fomentar el hábito de la lectura entre los bachilleres a través de diálogos informales y amistosos con los autores de obras a las que podrán acercarse más tarde, con la motivación adicional que significa conocer a quienes las crearon.

En esta edición 2021 Ecos de la FIL presentó 70 sesiones presenciales repartidas en varios municipios de Jalisco, así como 10 sesiones virtuales.

Artículo anteriorHomenajean en la FIL a Thomas Yuill, impulsor de la investigación académica 
Artículo siguienteUniversitarios de CUCosta marchan a Palacio de Gobierno en defensa de la autonomía universitaria