Mauricio Álvarez Arreola, recién egresado de la carrera de Arquitectura del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD), obtuvo el primer lugar en el concurso de cartel de la Asociación de Instituciones de la Enseñanza de la Arquitectura de la República Mexicana, A.C. (ASINEA).
La meta del ASINEA es el intercambio de conocimiento entre universidades nacionales sobre la arquitectura y el urbanismo. Mauricio destacó con el tema “La resiliencia en la arquitectura, la adversidad superada desde la enseñanza” en este primer concurso nacional que se llevó a cabo en la reunión 108 de ASINEA, donde participaron más de 60 personas, de las cuales 20 fueron finalistas. Hubo cinco menciones honoríficas y el ganador por unanimidad fue justamente el egresado del CUAAD.
El proyecto fue asesorado por Perla Zambrano Prado y Rosa María Sánchez Sosa, académicas de CUAAD.
¿Qué es para ti la resiliencia en arquitectura? Se trata de adaptación y responsabilidad al entorno, que sea sostenible, pero no como todos creemos que es, sino que literalmente el edificio sea capaz de sustentarse a sí mismo con sus propios recursos, que a través del tiempo sea adaptable, que los espacios sean flexibles, que se pueda dar un uso y pueda funcionar. No como edificios o fábricas que vemos abandonados porque no se les pudo dar otra vida; que sí se les pueda dar es parte de la resiliencia.
¿De qué habla tu cartel? Se enfoca en estrategias sostenibles. Integran el proyecto de un edificio como centro de desarrollo comunitario. En una primera parte doy el contexto del proyecto, y la problemática que decido trabajar que en medida es el incremento de la pobreza en colonias marginadas de Zapopan. Incluyo unas estadísticas generales de la geografía y posteriormente las estrategias sostenibles de mi proyecto basándose en el aprovechamiento de las azoteas, dándoles una función. Decidí incluir invernaderos en las azoteas más altas, incluyendo cultivos de mayor consumo en Jalisco.
También considero paneles solares, y cubiertas verdes en azoteas para regular la temperatura y recuperar el área verde que se desplazó para construir el edificio. En cuanto a mi última propuesta fue el análisis de la zona y ver que es propensa a inundaciones, por lo que se instalaron áreas de lluvia que ayudan a filtrar en agua de mejor manera al subsuelo, ayudando a evitar estancamientos.
¿Qué te marcó más de esta experiencia? Fue muy refrescante, muy nuevo y fue algo muy padre. Una nueva experiencia, pues fue mi primer viaje solo, mi primer concurso, mi primer congreso fuera, conocí mucha gente de toda la República. Es todo un evento donde hay talleres, conferencias y actividades, al final en la clausura fue la premiación, fueron tres días de nervios, pues tenía que explicar mi cartel a las personas que se acercaban a conocerme.
TEXTO: Tania Rivera / Difusión CUAAD