Ermilio Espinosa presentó Delirios abisales, exposición compuesta de rostros, agua y elementos lúdicos que le permiten al espectador adentrarse en las emociones desde la imagen, y que está montada en las salas 2, 3 y 4 del Museo de las Artes (MUSA) de la Universidad de Guadalajara, del 14 de marzo al 22 de junio.
“Esta exposición se llama Delirios abisales porque los delirios vienen del abismo mismo; imaginemos que vamos sumergiéndonos en un océano y nos alejamos de la luz, empezamos a dejar de ver lo que hay alrededor y dejamos de entender dónde están el cuerpo y el mundo; ahí encuentro mi identidad, lo que me da nombre, y donde dejamos de ser siete millones de habitantes y nos conformamos como uno solo”, compartió el pintor.
La inspiración de cada uno de los cuadros de la muestra surge de instantes en los que Ermilio ha conectado con emociones, piezas, juguetes o imágenes que se graban en su mente y después forman parte de sus trabajos; además, cuenta metáforas con la presencia de aves, barcos de papel, juguetes y dibujos infantiles que provocan rompimiento en las historias.
En su ideal, “la obra de un pintor no está completa sin el público; una parte la pongo yo en la obra, pero el significado, la historia y la profundidad la otorgan los espectadores. Espero que algunos elementos les remonten a su infancia, que encuentren un reflejo y puedan ver el fondo de su alma”, añadió Ermilio.
Las tres salas donde se encuentran las pinturas cuentan historias distintas; primero es el nacimiento del artista, con un retrato de su abuelo, quien fue su inspiración, su colega y amigo; también se puede apreciar su primera pintura titulada “La cirugía”, que tiene elementos lúdicos y expresa cierto dolor.
En cuanto a las otras dos salas, presentan un viaje por lo natural, desde la vinculación del humano con lo animal, el océano y la nada, y todo aquello que guardan las miradas. “Mis pinturas son evocadoras, no cierran en una respuesta y generan preguntas; hay muchos cuencos vacíos para que la vida de cada quien los llene”, dijo.
Sobre el agua y los rostros, Ermilio explicó que “el agua es aquello en lo que uno se sumerge, eso donde se nace y se muere pero que sigue existiendo, porque el océano es inmenso; ese mismo efecto que ayuda a entender la vida lo dan las emociones del rostro”, subrayó.
La experiencia visual, recalcó, va acompañada desde la lejanía, y ahora en colaboración con la música de Radaid, “siempre me he inspirado mucho en sus melodías y tener la oportunidad de presentar la pintura ‘Viaje al interior’ con ellos, es un honor”.
Delirios abisales estará abierta al público del 14 de marzo al 22 de junio, como una muestra colaborativa entre la University of Guadalajara Foundation USA y el Legado Grodman. La inauguración tendrá lugar el 13 de marzo, a las 20:30 horas y se contará con la participación del grupo musical Radaid.
