Para el creador y productor del disco Méjico máxico, del Instituto Mexicano del Sonido, Camilo Lara, la música es fundamental para cambiar a la sociedad y hacer del mundo un espacio más habitable.

“La música ilumina, cambia muchas cosas y es necesaria en el país y para la sociedad. Como un arquitecto que levanta un edificio, ayuda o no a la sociedad a hacer un lugar más habitable”, expresó en la entrevista conducida por el editor de la revista Marvin, Alejandro González, en el marco de la Feria Internacional de la Música de Guadalajara 2022 (FIM GDL).

Camilo Lara tiene producciones fundamentales en la música mexicana y ha producido a artistas como Los Ángeles Azules, Santa Fe Klan, Dan the Automator, Graham Coxon, Ludmilla, entre otros, además de producciones televisivas, videojuegos y cine como Thor: love and thunder, de Marvel y en la cinta Coco, de Pixar.

Hijo de padres abogados y humanistas, y con un hermano músico, ellos le abrieron su casa a bandas emergentes de los años 80 como Caifanes y La Maldita Vecindad.

La carrera del productor inició como escucha y lector voraz, luego como DJ en fiestas, músico y productor; la música lo modeló y sigue cambiando su vida.

“Me ha transformado cien por ciento: me cambió la vida porque si no hubiera tenido el valor de continuar en este camino, no habría viajado, conocido a mis mejores amigos, descubierto cosas. No concibo la vida sin estar cercano a la música”, compartió.

Para Lara la producción musical puede ser más táctica a través de la estructura de las canciones para conectar, de si mueve o no, o bien a través de la curaduría musical, es decir, la intención y el orden de las canciones en el momento en que se producen.

“Los discos, cuando los haces, son momentos de vida. Por ejemplo, Político surge en un momento de la llegada al poder de Enrique Peña Nieto. Luego, la vida pasa y uno cambia de opiniones y discos, y esos son los desdobles de los momentos creativos”, destacó.

Pese al éxito en las últimas décadas, Camilo Lara reconoce que no ha tenido un camino fácil.

“Siempre he sido un outsider por ser disquero, o DJ; me he sentido inseguro toda la vida porque no soy o no embono en los distintos lugares, pero he creado mi propia burbuja de fortalezas, de lo mejor que hago”, relató.

Una fortaleza es la curaduría musical y la consolidación de conceptos musicales. Las ideas y la creatividad necesitan disciplina y trabajo, junto con los destellos creativos, dijo. 

“El mundo es de ideas, no basta con esos destellos creativos: hay que levantarse y trabajar la creatividad porque todas las ideas son malas, y llegar a una no tan mala, es el camino para llegar a una mejor”, concluyó.