Mediante una simulación del comportamiento del virus del zika, un grupo de investigadores lograron en el laboratorio una mutación que lo hace más virulento, infeccioso y transmitible, lo que implica que si ésta se presentara de forma natural podría ocasionar problemas de salud, afirmó José Angel Regla Nava, profesor investigador del CUCS, de la UdeG y miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), quien participó en el estudio.
La infección por zika puede causar diversos problemas neurológicos, y en mujeres embarazadas el virus puede infectar al feto en desarrollo y provocar defectos de nacimiento, como la microcefalia. Por lo tanto, el mundo debe vigilar la aparición de esta mutación del virus.
La mutación se trata de un cambio en el genoma del virus que lo hace más virulento y transmisible, explicó el investigador.
Detalló que los virus del dengue y zika comparten en su estructura del genoma una homología muy similar. Es decir, ambos se parecen mucho, entonces si una persona se enferma de dengue, está protegida por cierto tiempo de infectarse por zika, pero debido a esta mutación ya no lo estaría, produciendo una evasión de respuesta inmunológica natural.
En el caso del dengue la incidencia a nivel mundial es de 390 millones de contagios, que ocasionan 24 mil fallecimientos anuales, y el zika ha ocasionado más de 50 mil infecciones, y tan solo en Brasil, más de 8 mil 600 defectos de nacimiento; esto es muy relevante, ya que más del 80 por ciento de las infecciones son casos asintomáticos.
“En el laboratorio, por ejemplo, infectamos un ratón, luego obtuvimos suero del mismo y recuperamos el virus, luego infectamos otro ratón, y así sucesivamente, con varias repeticiones para acumular una evolución natural del virus”, explicó.
“La relevancia del estudio es que nosotros nos estamos adelantando a lo que pudiera suceder en un futuro. Afortunadamente, hasta el momento, no existe dicha mutación en la naturaleza, pero en caso de aparecer en cinco, diez o quince años de manera natural, podríamos tomar medidas preventivas ante una posible epidemia, inclusive una pandemia y tiene relevancia porque podríamos rediseñar vacunas o antivirales para enfrentar un posible brote”.
El virólogo Regla Nava explicó que no se puede determinar con precisión cuándo podría aparecer esta mutación en forma natural. No se pueden hacer predicciones. Los virus RNA son impredecibles, no se sabe cómo van a evolucionar. Sin embargo, existe la buena noticia de que esta mutación no está presente a nivel mundial. Por lo tanto, hay que hacer monitoreo genómico para hacer secuenciación de los casos de zika en los pacientes.
“Esperamos que la mutación no aparezca pronto, pero si sucediera, habría que estar prevenidos para actuar de manera adecuada”, dijo.
Medidas preventivas
Aclaró que la mutación puede ser evitada o puede retardarse la evolución del virus evitando contagios mediante medidas sanitarias, que abarcan el uso de insecticidas para evitar la propagación del mosquito causante del dengue y zika, evitar la acumulación de cacharros, como contenedores o llantas abandonadas que puedan acumular agua y favorecer la formación de larvas y una posterior generación de mosquitos.
A las personas se les recomienda usar vestimenta larga, que proteja sus piernas, además de sus brazos y usar repelente contra mosquitos sobre todo en zonas que favorecen la multiplicación de vectores.
Detalló que tanto los mosquitos Aedes Albopictus y Aedes Aegypti son vectores transmisores del zika, pero hay otras vías de contagio como la transmisión por vía sexual, transfusión sanguínea, a través de la leche materna y de manera perinatal, es decir, la madre transmite este tipo de enfermedad al hijo.
El doctor Regla Nava lleva más de trece años trabajando en la lucha contra las enfermedades emergentes y reemergentes, e inició esta investigación desde 2016 que fue publicada finalmente en abril de 2022 en la prestigiada revista científica Cell Reports. Los investigadores participantes trabajan en su mayoría en el Instituto de Inmunología de la Jolla en California y de la Universidad de Texas, en Estados Unidos.
La publicación completa del trabajo puede ser encontrada en el siguiente link: https://doi.org/10.1016/j.celrep.2022.110655