La Compañía de Teatro del Centro Universitario del Sur (CUSur), se prepara para participar en la cuarta edición del Festival de Teatro Ernesto Neaves Uribe, de Zapotlán El Grande, a celebrarse del 27 de febrero al 3 de marzo, con la puesta en escena Adictos Anónimos.

Esta obra, dirigida por Rosy Arellano, busca concientizar a la población en general, desde adolescentes hasta padres de familia, sobre diversas problemáticas generadas por adicciones a fármacos, sexo y redes sociales, entre otras.

“Llevamos a cabo todo un trabajo de investigación sobre la temática para que las y los integrantes pudieran vincularse y crear los personajes, que están completamente actualizados, ya que esta obra se basó en una propuesta que tiene Luis Mario Moncada, pero vimos que los personajes que él tenía, creados en los años 90, ya no estaban muy cercanos a la realidad”.

Explicó que la obra, que se ha presentado en diversas sedes de la región, así como en Guadalajara, Toluca y la Ciudad de México, ha tenido un buen recibimiento por parte del público.

“Está dirigida a un público mayor a los 15 años por la temática y hemos tenido un excelente respuesta no sólo de jóvenes, también con los adultos, adultos mayores, generalmente hacemos una retroalimentación al final y nos comentan que no sólo tiene que ver con lo qué pasa con la juventud, sino con los padres que muchas veces están ausentes y no hay comunicación con los hijos. El montaje da para hacer una reflexión a profundidad y proponer cambios para una mejor calidad de vida”.

En cuanto a la participación en el festival organizado por el ayuntamiento de Zapotlán El Grande, dijo que vincula a diversas agrupaciones que desde hace varios años se ha dedicado a realizar teatro en la región Sur.

“Participarán también dos grupos que trabajan con infantiles, cuentacuentos y hay teatro de carpa que durante muchos años estuvo en boga, y se ha ido perdiendo y lo están rescatando. Habrá un taller con Felipe Aguilar, director de de la compañía de teatro del ayuntamiento y se vio viable que en este marco pudiéramos develar la placa de 50 representaciones de la obra”.

Explicó que luego de esta participación, planean hacer una siguiente parte de la obra, una precuela donde mediante microteatro se presenten pequeñas historias de los personales antes de llegar a la adicción y propiciar las reflexiones de qué podemos hacer para no llegar a esos límites.

“Eso lo prepararemos el segundo semestre del año y también estamos próximos a estrenar nueva obra con el apoyo del Consejo Estatal para la Cultura y las Artes, se llama 400 puntos,  sobre contaminación del aire y queremos llevarla a Guadalajara, es un montaje que nos interesa mucho y hay otra obra que se llama Don TiburcioTiburón, del dramaturgo Hugo Salcedo, que está enfocada para niños, adolescentes y se vincula con talleres sobre cultura de paz, ya que en la obra se trabaja el tema de violencia en las infancias, estamos tratando de que el teatro no sea sólo teatro, sino que se vincule con un trabajo comunitario”.