De pronto alguien gritó y todo mundo se echó al piso. «Hay alguien con un arma», se escuchó a las 5:15 pm en los pasillos de la Preparatoria Regional Santa Anita, en Tlaquepaque, y rápidamente los alumnos se pusieron en acción al seguir las medidas que han aprendido en simulacros como éste.
Bajo la hipótesis de un estudiante armado, con arma de fuego, infiltrado en los salones, alumnos de esta preparatoria de Tlaquepaque participaron por primera vez en un simulacro de repliegue parcial, escondiéndose entre las butacas como lo indicaban alumnos brigadistas de cada aula que participó en el ejercicio.
Luis Arias Uribe, responsable de la Unidad Interna de Protección Civil de esta prepa, explicó que con este simulacro se busca prevenir incidentes que comprometan la integridad de la comunidad estudiantil, pero también para capacitarlos en caso de que ocurran episodios violentos.
«Estamos capacitando al alumnado, al personal docente y al personal administrativo de cómo actuar bajo un protocolo establecido que estamos denominando Código Azul», indicó.
Arias Uribe detalló que en la organización del simulacro participaron 70 alumnos de sexto semestre, quienes cursan las TAEs (Trayectorias de Aprendizaje Especializante) de «Difusión y Atención a las Contingencias» y «Protección Civil» y han sido capacitados para dar indicaciones durante episodios como estos.
Además también se contó con el apoyo de 15 miembros del personal de la prepa que se involucró y de elementos de la Policía Municipal de Tlaquepaque.
Por su parte, el estudiante de sexto semestre Brandon Joseph Herrera de Alba, miembro de los brigadistas de Protección Civil, relató que desde el inicio del semestre se planteó la idea de llevar a cabo esta iniciativa, organizándose en grupos de voluntarios que asistirían a los demás estudiantes que no estaban enterados del simulacro.
“Infiltramos a algunos de nuestros integrantes a los salones para que pudieran dar las instrucciones de qué hacer en caso de que hubiera un tiroteo”, mencionó.
El ejercicio se llevó a cabo en los niveles medio y superior del edificio C, donde, con excepción de los voluntarios y brigadistas, se desconocía que se llevaría a cabo el simulacro. En total el tiempo de reacción fue de aproximadamente tres minutos, añadió Arias Uribe.
Posteriormente se dio aviso a la Policía de Tlaquepaqe, como establecía el protocolo, con un tiempo de reacción de un minuto, precisó la Secretaria Administrativa de la prepa, Licenciada Sandra Evelia Moreno Ángel.
«Creo que los alumnos recibieron un mensaje bastante sólido y objetivo en el sentido de que en cualquier momento debemos estar preparados y sobre todo todo el tiempo para buscar las medidas con las cuales podamos prevenir cualquier riesgo», manifestó.