Los Leones Negros regresaron al trabajo en cancha, de cara a lo que será el inicio del torneo de la Liga de Expansión, programado para el 14 de agosto, en el que participarán 17 clubes.
Cumpliendo con todos los protocolos sanitarios, la escuadra universitaria regresó al campo luego de un proceso de tres semanas de entrenamiento específico en casa para poder regresar a la actividad en campo, expresó el preparador físico del equipo Fernando Ramos.
“Se escucha raro pero hicimos entrenamientos para poder entrenar en cancha, para que haya una adaptación anatómica para los jugadores, no es lo mismo lo que trabajas en casa que lo que trabajas en cancha y esta semana que volvemos de lunes a sábado, realizaremos ejercicios de adaptación para volver a acostumbrar al cuerpo del futbolista a movimientos específicos en el futbol, como frenar, arrancar, pensar, tocar una pelota, girar, todas las acciones motrices que requiere un futbolista».
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Agregó que «esta semana la vamos hacer de adaptación para evitar lesiones que es lo que preocupa a todo equipo que está regresando a la actividad. Lo vimos en los equipos de Europa, en los equipos de México que han regresado en esos partidos de pretemporada, que ha habido muchas lesiones de articulaciones, tendones y musculares”.
Recordó que fueron cuatro meses los que el equipo estuvo alejado del campo de juego, por lo que es importante que esta primera semana sea de adaptación a trabajos y que el futbolista se familiarice con el balón.
“La siguiente semana ya empezamos a tocar ejercicios específicos, donde vienen trabajos de cuatro contra tres, cinco contra dos, ejercicios más enfocados a la competición y la tercera semana ya comienzan los trabajos en conjunto, tácticos, el futbol reducido y la cuarta semana ya empezaremos a hacer futbol entre nosotros esperando tener rival para hacer partidos amistosos de acuerdo a lo que nos requiera la liga y el sector salud”.
En cuanto al estado anímico de la escuadra universitaria, señaló que los jugadores quieren hacer sprints, patear a gol, por la ansiedad de cuatro meses sin hacerlo, por lo que se les ha hecho ver la importancia de ir poco a poco.
“Es tratar al jugador como si viniera de una lesión de seis meses y lo vas llevando paulatinamente, por el tiempo que pasaron sin tocar el balón. Tomaron en serio el trabajo de casa. Ahorita los vi como pez en el agua, los ves felices, respirando aire puro, sí los notas como el clásico jugador que va a debutar y está disfrutando esa semana previa, los vi con toda la disposición y físicamente bien, sí se adaptaron y absorbieron bien el trabajo en casa”.
