Cuando los españoles comenzaron a conquistar el Occidente de México, al territorio conformado por Jalisco, Zacatecas, Aguascalientes, Nayarit y Sinaloa se le denominaba como Chimalhuacán.
Al igual que otros territorios de América, aquí también la intervención y despojo de los pueblos originarios fue brutal.
Este fragmento de la historia jalisciense fue retratado en el mural La Bárbara conquista de Nueva Galicia, por el artista y político tapatío José Guadalupe Zuno, al interior del Museo Regional de Guadalajara.
Se trata de un mural hecho al fresco de 5.65 metros de ancho y 5 de alto.
Fue en octubre de 1953 cuando el también refundador de la Universidad de Guadalajara creó esta obra pictórica, que se encuentra en una de las salas de exposición en la planta alta.
A 67 años de la creación del mural, personal del Despacho Cultura y Patrimonio restauró dicho mural de varios desperfectos que el tiempo causó, con financiamiento de los descendientes de José Guadalupe Zuno.
La restauradora Karla Jáuregui fue la encargada de supervisar los trabajos al interior del recinto histórico, que está a cargo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
«El mural se encontraba dañado porque el muro en el que se hizo era nuevo (no formaba parte de la estructura original del antiguo Liceo de Varones). Esto produjo ciertos movimientos que generaron fisuras«.
«Se restauró, se hizo limpieza y reintegración cromática. El INAH dio fe de los trabajos realizados dentro del edificio que es histórica».
Otros de los procesos emprendidos fueron la limpieza físico-química, inyección de oquedades y resanes de grietas. Según el diagnóstico previo a la restauración de la obra, se identificó que las grietas eran profundas y con separaciones de hasta 5 milímetros, una en forma de arco y otra vertical.
Indicó que las encargadas del proyecto de restauración fueron Maria Eugenia Curiel y Gabriela Rodríguez de Anda, del despacho antes mencionado.
Karla Jáuregui recalcó que la mayor recuperación es que la obra pictórica será rescatada del olvido y ahora los visitantes podrán admirarla.
Pues la pintura solía estar detrás de una cortina, debido a que las exposiciones que se montaban en su sala requerían ciertos discursos museísticos que cambiaban en todo momento.
«Desde 1960 no había tenido una intervención como ésta, no era una pintura que estuviera en un estado tan grave, pero lo mas importante es que se dará a conocer«.
Dijo que los trabajos se realizaron en varios momentos entre 2019 e inicios de 2020. Se pensaba hacer una ceremonia para presentarla, sin embargo, se ha pospuesto debido a la pandemia.
La también integrante del Taller de Restauración del Museo Regional indicó que este mural es una de las pocas obras de ese tipo que se conocen de Zuno.
«Como pintor plasmó diferentes planos sobre distintos temas que tiene que ver con la conquista de México. Él mostraba la cultura indígena de ese momento histórico. La corriente muralista buscaba llevar un mensaje masivo y social en los muros de edificios públicos de la ciudad».
Un mural lleno de simbolismos
El director del Museo Regional de Guadalajara, Roberto Velasco, indicó que La conquista de la Nueva Galicia es una pintura que recupera su esplendor alrededor de fechas conmemorativas importantes para la historia de México.
- Los 500 años de la Caída de Tenochtitlán (13 de agosto de 2021)
- El 480 aniversario de la Guerra del Mixtón
- Los 490 aniversario del inicio de la segunda campaña de conquista de Nuño Beltrán de Guzmán
- El bicentenario de la Consumación de la Independencia de México (27 de septiembre de 2021)
- La pintura fue inaugurada en el año que se conmemoró el bicentenario del natalicio de Miguel Hidalgo y Costilla (1953)
Describió que entre lo que se muestra en el mural está la leyenda del retorno de Quetzalcóatl, idea que era atribuida a los españoles que llegaron del Atlántico; las atrocidades de los conquistadores para con los pueblos originarios al igual que el dios prehispánico.
De los personajes que Zuno plasmó son Nuño Beltrán de Guzmán y Pedro de Alvarado, quien acompañó a Cortés desde su llegada hasta la caída de Tenochtitlán.
Recalcó que en el museo ya se trabaja para consolidar un recorrido para que el mural luzca como parte de la museografía, en un área destinada al arte plástico del siglo XX, sobre todo en cuanto a la corriente del muralismo mexicano.
«Buscamos crear un recorrido coherente, que de forma natural te lleve al tema. Es una obra muy meritoria, desde la creación de los pigmentos a la aplicación del fresco con un margen de error muy limitado».
«Es un esfuerzo para que el mural tenga su lugar y la obra a su alrededor tenga una idea sobre la misma pintura».
Recordó que gracias a Zuno «este recinto lugar se convierte en un museo. En sus palabras, ésta es una ofrenda que da al pueblo de Jalisco».
Adelantó que cuando se presente el mural restaurado, se hará acompañado de una muestra de la obra de Zuno como artista.
El museo está en espera a que el semáforo nacional cambie a amarillo para poder reabrir y recibir a los visitantes.
