Por las manos de Rosalía del Carmen Macías han pasado miles de libros que luego enriquecen la imaginación de quien lee. Ella ha sido una guardiana en las bibliotecas, organizando, conservando y difundiendo el conocimiento, convirtiéndose en la bibliotecaria homenajeada en esta edición de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL 2022).

La historia de Rosalía del Carmen no puede contarse sin recordar su trabajo en las bibliotecas, desde donde ha impulsado el amor por el orden de los libros, pero también se ha convertido en una formadora de profesionales que, al igual que ella, trabajan en ofrecer una experiencia grata en las bibliotecas para atraer a los lectores.

“Gracias por el empeño que ha puesto en formar a bibliotecarios de carrera; por estar convencida de que las bibliotecas deben de ser dirigidas por profesionales de la información; por su generosidad para asesorar y aconsejar las mejores prácticas en la gestión bibliotecaria”, resaltó en la ceremonia de homenaje el Director del Sistema Universitario de Bibliotecas de la UdeG, Sergio López Ruelas.

En su trayectoria, Rosalía del Carmen acumula experiencia como Directora General de Bibliotecas de la Universidad de Guanajuato por más de 12 años, además de haber colaborado en otras instituciones, ser autora de libros sobre la situación bibliotecaria y compartir sus conocimientos como docente.

“Algunos de sus alumnos nos dieron un testimonio que habla de su excelencia como profesora y lo mucho que les han servido los principios, conceptos y aplicaciones de sus enseñanzas, las cuales han contribuido a su éxito personal, profesional e institucional”, añadió López Ruelas.

Rosalía del Carmen es un personaje que, junto con su difunto esposo José Luis Villar, propiciaron el amor por la lectura entre cientos de lectores ocasionales y apasionados por los libros gracias al trabajo de organización y acceso a la lectura que impulsaron en las bibliotecas, declaró la Directora de la FIL, Marisol Schulz Manaut.

“Las personas encargadas de las bibliotecas, más allá de asumir el control y organización del acervo disponible en estos recintos, realizan una labor humanística fundamental, pues motivan el encuentro entre los grandes universos escritos y los lectores”, dijo.

Luego de recibir su reconocimiento de manos del Rector General de la UdeG, Ricardo Villanueva, la bibliotecaria homenajeada recordó su infancia, contó que conoció los libros en su hogar, algo que poco después dejó de ser sólo una afición para convertirse en una pasión que, ahora, se ha combinado con su vocación.

“Mientras mi papá se ocupaba, me dejaba en la biblioteca y en el área de consulta me encantaba hojear las enciclopedias, y pensa, seguramente tenía ocho o nueve años, ‘Cuando sea grande quiero trabajar en un lugar como éste’”.

Aunque su papel podría limitarse a organizar y facilitar los espacios y las rutas para que todos tengan acceso al conocimiento, el trabajo de Rosalía del Carmen ha influido en cientos de personas, quienes han pasado de ser sólo lectores a convertirse en promotores de la lectura, reconoció la historiadora y bibliotecnóloga Diana Eugenia González Ortega.

“Este retrato hablado de una bibliotecaria tiene nombre y apellido, es un ser humano sensible y estudioso, es una persona que ha alcanzado los más altos niveles de preparación profesional que hoy representa a todos los bibliotecarios y bibliotecarias de nuestro país”, dijo González Ortega.