De entre cientos de mexicanos, fue seleccionada —al igual que un joven de Monterrey—, para participar con delegados de 193 países en el Foro de la Juventud 2011 que organiza la UNESCO y cuyo tema principal en esta séptima edición celebrada en París fue “Los jóvenes como motor del cambio”.
Su nombre es Ruth Mariana Mejía Padilla, de 22 años de edad. En todas sus etapas como estudiante ha alcanzado los mejores promedios de los planteles educativos en que ha estudiado, desde la primaria Gómez de Mendiola, hasta la Carrera de Derecho que cursa en el Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades.
Por dos años más será Delegada de México ante la UNESCO, y uno de sus principales retos de esta joven entusiasta e interesada en motivar un cambio entre la juventud, es lograr la inclusión de la juventud mexicana en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
¿Cuál fue tu experiencia en el foro de París como Delegada de México?
Mi aprendizaje y experiencia en este foro es haber sido parte de una política internacional que no se guía por costumbres, religiones, culturas, partidos políticos o intereses particulares, sino por una intención de poder llegar a soluciones y acuerdos que motiven e impulsen el desarrollo de la juventud. Esto fue un gran paso, aprendí mucho, son dos años de trabajo y habrá que darle seguimiento a lo que ahí trabajamos. Ahora nos toca a los jóvenes tomar la estafeta generacional. Además, el contacto e intercambio con los jóvenes delegados y la posibilidad de aprender es lo que me da nuevas experiencias.
¿Cuáles son los retos u objetivos por cumplir como Delegada en los próximos dos años?
Buscaré abrir el Youth Desk en nuestro país (la Comisión Nacional de la Juventud ante la UNESCO), para tener la inclusión de la juventud mexicana en la ONU, con diferentes proyectos e iniciativas de alcance global. Es importante que los jóvenes formemos parte de este mundo globalizado.
Desde tu óptica, ¿cuál debe ser el compromiso de los jóvenes jaliscienses con su ciudad y con su país?Â
Que los jóvenes encabecemos a nivel nacional las distintas acciones, movimientos, grupos y asociaciones  que llevan a cabo un trabajo importante a favor de la dignidad de la persona humana. Por eso es necesario que cambiemos nuestra apatía e indiferencia por la acción y el compromiso que tanto necesita nuestro país en estos momentos, a raíz de tantos crímenes, violencia e impunidad que vivimos. Nuestro compromiso en nuestro estado y en nuestro país debe enfocarse en el interés de construir una sociedad más justa, pero sobre todo una sociedad más humana en la que impere la paz y la armonía social.
¿Qué cambios deben generar para modificar sus circunstancias?
Debe haber una mayor interacción entre gobierno y ciudadanos, que exista una interlocución para escuchar realmente lo que los ciudadanos queremos y necesitamos. Sin duda creo que falta mayor responsabilidad de las dos partes. Por una parte de los representantes públicos que creen que con el voto ya tienen la voluntad de la gente durante todo el periodo de su gestión y pocas veces regresan a la calle con los ciudadanos que les dio el voto. Pero también hay que reconocer que existe un déficit ciudadano de participación que considera que con votar una vez cada 3 o 6 años se resolverán las cosas.
En este momento se viven tiempos electorales en México, ¿cuál crees que sea el ánimo ante este escenario?
Un ánimo de participación, de debate de ideas, de informarse; y en este ánimo debe haber mucha responsabilidad en los jóvenes universitarios. Las cuestiones del país no se resuelven sólo con la crítica, ni la abstención, sino con la participación e integración de los procesos que como ciudadanos tenemos que intervenir. En nosotros radica la fuerza de cambiar las cosas por un México mejor, más solidario, seguro y lleno de oportunidades. Para vivir en democracia no únicamente hay que exigir el respeto de nuestros derechos, sino también cumplir con nuestras obligaciones, por ello yo invitaría a que no le demos la vuelta a los asuntos públicos sino que nos acerquemos, que vigilemos a las autoridades, que estemos al pendiente de quienes son los candidatos y ver sus historiales, para en este sentido lograr un voto lo más racional y responsable posible, exclusivamente votando y participando podremos exigir más.
Primera persona
Ruth Mariana Mejía Padilla es estudiante de la Carrera de Derecho en el CUCSH, y Delegada de México ante la UNESCO.
