Las figuras prehispánicas, el color y el feminismo se unen en las piezas que la tapatía Sofía Echeverri trabaja como parte de la residencia que realiza en el Museo de las Artes (MUSA).
En una de las salas, la artista plástica se arroja a la creación bajo la mirada de los visitantes que, curiosos, se acercan a charlar con ella y ver cómo se realiza una obra de arte.
El programa Artista en residencia es una actividad educativa que pone en contacto al visitante con las diferentes etapas del proceso creativo de un autor.
Con esto, desde el pasado 16 de junio Echeverri finaliza parte de una colección de pinturas llamada «Arqueología secreta», la cual junto con las colecciones de dibujo «Pedir la lluvia»; así como de escultura e instalación «Señoras del saber», formarán parte de una exposición que será inaugurada el próximo 15 de julio.
¿Cómo surge esta colección?
Este proyecto hace varios años que lo estoy desarrollando. En 2017 me asomo a ver lo que tienen de México en la página web del Museo Metropolitano de Nueva York y veo que las figuras prehispánicas masculinas tienen títulos como jugador de pelota, chamán o gobernante, contra los de las figuras femeninas que tienen nombres como mujer con abanico o mujer sentada. Me llamó la atención de que a los varones sí se les asigne un oficio tan definido y que las mujeres solo un descripción física.
Indagué en otros museos y lo que hago en la obra es intervenir las figurillas dándoles una profesión o un oficio, no las intervengo en cuanto a su estructura sino con abstracciones o figuras geométricas que pueden sugerir un oficio para abrir un ‘cómo sería nuestra historia’, nosotras mismas en nuestro presente y nuestra proyección hacia el futuro si nos hubieran contado una historia similar a la de los varones, con un pasado tan relevante, incluyente y activo como el de los varones.
¿Con ello buscas reinterpretar lo que la figura de la mujer habría sido?
Las mujeres sí estábamos mucho más involucradas socialmente, no nada más cocinando y cuidando hijos, es una relectura sin yo ser arqueóloga. Tratar de imaginar con la información que tengo qué papel desempeñaría una figurilla como esa y qué nos está contando.
¿Cuál es el criterio para elegir los colores para intervenir cada pintura?
Dependiendo de la profesión o el oficio, por ejemplo la antropóloga que estudia las diferentes capas de la tierra, decidí intervenirla con verdes más de la naturaleza y vegetación; la geóloga tiene piedras pero también es una interpretación de las piedras de la región y sus colores, no es jade ni jadeíta, pero podría ser o no, eso es parte de la intervención que hago con abstractos y geometrías a color, es un lenguaje que he desarrollado desde 2003.
¿Cómo es el diálogo de esta obra con las otras dos de la exposición?
La otra serie “Pedir la lluvia” es una investigación que hice sobre las festividades de los pueblos originarios para dar inicio a los ciclos agrícolas. Después de estudiar varias comunidades en varios estados me doy cuenta que tienen muchos elementos en común, uno de ellos es que sólo son los varones los que las realizan. Lo que hago es tomar esas estéticas para cambiarles el género, entonces en vez de ser Los borrados, de los Coras, los pongo como Las borradas, en vez de Tastoanes, de Tonalá, le pongo Las Tastoanas, para abrir estos cuestionamientos del tiempo libre y de goce que podemos tener dentro de la comunidad.
En «Señoras del saber» son figuras con cabeza de cerámica, cuerpo textil y con atributos de cortes de MDF. Son 10 figuras que representan los 10 feminicidios que ocurren a diario en nuestro país, según las cifras oficiales y que se acompaña con un audio que realicé con mujeres de origen indígena que hablan 10 lenguas distintas, como mazateco, tzotzil, maya, entre otros. Lo que vamos a escuchar es la letra de la canción «El violador eres tú», del colectivo chileno Las Tesis, traducido a estas lenguas originarias. Es una pieza hermosa porque es la personalidad de cada chica leyendo las frases con diferentes acentos y pareciera que están en un ritual.
¿Cómo ha sido realizar esta residencia en el Musa?
No había vivido una residencia artística de este tipo, las residencias donde yo había participado te refugias en un estudio a puerta cerrada y trabajas, a final de la estancia sucede la apertura de los estudios y se invita a las personas a ver lo que se realizó. Aquí es un modo distinto, se abre al público desde del día 1 para que la gente se acerque y puedas platicar con ellos y ha sido una experiencia completamente diferente y súper interesante que la gente se acerque a hacer preguntas.
Quién es Sofía Echeverri
Echeverri es egresada de la licenciatura en Artes Visuales por la UdeG. En París se especializó en técnicas antiguas y modernas de dibujo en el Musée du Louvre y en el Atellier d´art Chevreuse. También estuvo vinculada con el taller de litografía de Leonard Codex, en Nueva York.