El aislamiento derivado de la pandemia por la Covid-19 ha hecho que las personas busquen recursos para pasar el tiempo libre. Uno de éstos son los videojuegos, cuyo uso incrementó hasta 250 por ciento durante los últimos meses y de paso ha generado interacción social a la distancia.
“Los videojuegos han cobrado relevancia como una de las alternativas que permiten que los usuarios no solamente se distraigan de los problemas y de las complicaciones que estamos viviendo, sino también como un medio de interacción social entre las comunidades que se forman en las distintas plataformas”.
Así lo afirma Óscar Solís Rodríguez, responsable del programa de Ingeniería en Videojuegos, del Centro Universitario de la Costa, con sede en Puerto Vallarta, quien agrega que se “ha incrementado de manera exponencial” el uso de esta herramienta.
El entretenimiento cambió, dice el académico, y eso propicia que quedaran atrás los momentos en que los amigos se reunían los fines de semana para jugar o había que ir a las “las maquinitas” para desafiar a la máquina.
“Actualmente hay videojuegos al alcance de prácticamente todo aquel usuario que tenga un dispositivo móvil, hay una gran variedad disponible para compra y descarga gratuita. El gran despunte de su crecimiento fue debido a la aparición y evolución de los dispositivos móviles, particularmente los teléfonos inteligentes o smartphones”, explica.
Detalla que según el portal DaraReportal, en enero de 2020, el número de usuarios de dispositivos móviles en el mundo superó los cinco mil millones. Los más utilizados son los smartphones con 53.3 por ciento, superando a las computadoras con 44 por ciento de las preferencias, las tabletas con 2.7 por ciento y las consolas de videojuegos con 0.07 por ciento.
PlayStation 4, Nintendo Switch o Xbox One. Las variedades de consolas y plataformas son muchas para los usuarios. Según opiniones de vendedores de la Plaza de la Tecnología en Guadalajara los videojuegos más vendidos son Fortnite, Final Fantasy VII, Mario Kart y FIFA 2020, entre otros, aunque la mayoría de las personas los adquieren en la piratería.
El especialista señaló que lo primero a tomar en cuenta es la verificación del rango de edad al que va dirigido el videojuego pues esto determina el tipo de contenido.
Además se recomienda descargar o comprar aquellos que promuevan el desarrollo de competencias o habilidades personales, sobre todo aquellos con enfoque social.
“También es importante que los padres conozcan los tipos de juegos disponibles más populares en el mercado y que identifiquen los beneficios e inconvenientes de cada juego. Finalmente, que vean la compra de un videojuego como una inversión más que como un gasto. De lo contrario es mejor no comprarlo”, concluyó.